El Ibex no logra conquistar los 8.100 puntos y cierra con una caída semanal del 2,36%

EUROPA PRESS 14/06/2013 18:09

De este modo, el parqué madrileño ha llegado al viernes con una caída acumulada del 2,36%, en una semana en la que el Popular se ha convertido en el 'farolillo rojo', con una pérdida del 8,7%, y Sacyr se ha alzado con el título del mejor valor, con un avance del 5,26%.

Banco Popular ha encabezado el ránking de pérdidas en la jornada de hoy, con un retroceso del 2,55%, seguido de Inditex (-1,85%), Acciona (-1,38%), BME (-1,30%) y Caixabank (-1,07%). En el lado contrario se han situado Sacyr, que ha repuntado un 9,09%, Mediaset (+3,45%), DIA (+1,42%), ACS (+1,39%) y ArcelorMittal (+1,36%).

Los 'pesos pesados' del Ibex no han mantenido una tendencia clara, y frente a las pérdidas de Inditex y Telefónica (-0,79%), se han encontrado los avances de Repsol (+0,75%), Santander (+0,67%), BBVA (+0,51%), Endesa (+0,21%) e Iberdrola (+0,12%).

EUROPA, EN PLANO

La situación en Europa no ha sido muy optimista, y las principales plazas se han movido en positivo, pero sin conseguir grandes ganancias. Francfort ha repuntado un 0,5%, París un 0,2% y Londres un 0,07%. En el mercado de divisas, el euro se intercambiaba a 1,3342 'billetes verdes'.

La evolución del parqué madrileño se ha visto marcada por la decisión de Standard & Poor's de ratificar los ratings a largo y corto plazo 'BBB-/A-3' asignados a España, cuya calificación a largo plazo continúa bajo una perspectiva 'negativa', lo que representa un riesgo de bajada de la nota española en los próximos 12 a 16 meses.

Esto ha coincidido con la publicación de los datos de deuda pública, que ha batido otro récord histórico en el primer trimestre y se acerca ya al 90% del PIB. En este sentido, el analista de XTB Daniel Álvarez ha apuntado que la situación en el largo plazo es "insostenible".

"La adecuación del tamaño de las administraciones a nuestras necesidades reales es una obligación, y la lentitud de nuestro aparato estatal, un obstáculo. Evidentemente, el deterioro en la calificación crediticia, unido a la penalización que sufre España al acceder a los mercados de crédito, sigue siendo una grave consecuencia de esta situación", ha subrayado.