Por eso, queremos contarte la historia de Luciano Baietti, un auténtico fenómeno. Su nombre está en el Libro Guiness de los Récords desde 2002. Ese año había completado su octavo grado universitario, convirtiéndose en la persona con más títulos universitarios del mundo.
Pero para Luciano, ocho grados no eran suficientes y en 2017, con 70 cumplidos, completó su decimoquinta carrera universitaria. Filosofía, Humanidades, Criminología, Educación Física, Alimentación… Luciano no ha parado de estudiar. La última de estas titulaciones la hizo a distancia, enfrentándose a un nuevo reto: aprender a manejarse con las nuevas tecnologías para poder aprovechar las posibilidades de la educación online. Es un claro ejemplo de fuerza de voluntad y valentía.
No hace falta que lleguemos a este extremo, pero detrás de la historia de este septuagenario italiano hay una gran historia de la que podemos aprender mucho. Su amor por el aprendizaje y el conocimiento, su inagotable curiosidad por asuntos de lo más diverso y su pasión por los retos, dan mucho que pensar. Luciano parece haber entendido eso que dijo alguien sobre el ser humano: no somos solo lo que ya sabemos, sino todo lo que nos queda por aprender; una idea muy alentadora, si pensamos que nuestra esperanza de vida se alarga y que tendremos más tiempo y, esperemos, que más oportunidades.
Pero no hace falta llegar a los 70 años -ni tampoco ser Luciano- para comprender que la formación continua va a ser más necesaria que nunca en el mundo en el que vivimos hoy y, por supuesto, a este ritmo, en el del mañana. La tecnología no para de avanzar a un ritmo frenético. Piensa en todo lo que no existía o no usábamos hace diez años y que hoy en día es parte esencial de nuestro día a día. Nuestras vidas y modo de hacer las cosas han cambiado radicalmente. Además, cada vez se requieren más competencias y se exige una mayor especialización, tanto en el entorno laboral como en el personal.
Ante todos estos retos, la educación y la formación constante, ya sea para ti o para tu familia, deben formar parte de tu proyecto de planificación patrimonial. Aprender idiomas, hacer un curso de posgrado, estudiar en el extranjero, obtener una certificación específica para desarrollar algún trabajo o llegar a dominar un instrumento musical, son proyectos que requieren de distintos tipos de esfuerzo.
Una buena planificación, basada en sus objetivos y en su situación, le puede ayudar con el esfuerzo económico. En Tressis, tanto para ti como para tu familia. Para lograr el resto, el esfuerzo dependerá de ti, pero con algo de tesón y la ilusión de Luciano no habrá meta que se te resista.