Tras quedar voluntariamente fuera del acuerdo entre PP y PSOE para fijar una posición común ante la próxima cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE, que se celebrará el 27 y 28 de junio, la coalición de izquierdas ha cargado contra los grupos mayoritarios por tratar de imponer un texto al resto de formaciones.
Así, su portavoz parlamentario, José Luis Centella, ha espetado a socialista y 'populares' que "hoy España no es un país bipartidista" y que el resto de formaciones no son "comparsas", por lo que "negociar por teléfono un acuerdo de café está fuera de este tiempo" en el que los ciudadanos piden "más Parlamento y más transparencia.
PROPUESTA PROPIA
Además, ha asegurado que su propuesta de acuerdo incluye "soluciones y no fotos" y ha lamentado que el PP se haya opuesto reiteradamente a celebrar un pleno monográfico sobre este tema donde todos los partidos pudieran debatir "en igualdad de condiciones" y plantear sus propuestas.
En concreto, la proposición no de ley que la Izquierda Plural defenderá en sesión plenaria reclama la reforma del artículo 135 de la Constitución para volver al 'status quo' anterior y la promoción en el Consejo Europeo de la derogación del pacto de estabilidad, la aplicación de un plan de emergencia contra el paro dotado al menos con 120 millones, el avance hacia la unión bancaria "germen de una banca pública europea"
Asimismo, reclaman que se renegocie el Memorándum de Entendimiento (MoU) del rescate bancario para excluir la inversión en educación, sanidad y lucha contra la pobreza y el paro juvenil del cómputo del déficit público; y que se fije una estrategia para la armonización fiscal, entre otras cosas.
"ESTADO TERMINAL"
El diputado de ICV Joan Coscubiela ha añadido que "la alternativa a la austeridad no la pueden ofrecer" quienes reformaron la Constitución para situar a los bancos "por delante" de los ciudadanos, y ha señalado que "la foto del Pacto de Estado se ha convertido en una foto del estado terminal del país, del coma del bipartidismo".
Finalmente, Chesús Yuste (CHA) ha recordado que lo que está en juego es "no sólo salir de la crisis sino qué quedará de la UE después" y ha rechazado de plano la austeridad "suicida" que impone la troika.
A primera hora, el presidente del grupo parlamentario, Cayo Lara, avanzaba que estaban a la espera de que los partidos mayoritarios se "replantearan" su postura e incluyeran en el pacto una modificación de la Constitución, una petición de que el Banco Central Europeo (BCE) compre deuda directamente a los estados y que se apueste "de verdad" por la inversión. Todo lo demás, a su juicio, son "chapuzas" derivadas de una dinámica bipartidista que es "la que está causando los problemas".