El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, ha reclamado al Gobierno nuevas medidas para profundizar en la corrección de los desequilibrios que aún persisten en la economía española, aunque se hayan producido "progresos apreciables" en este sentido.
"Éste resultado positivo no debe desviar la atención de la necesidad de continuar con la adopción de medidas que profundicen en la corrección de desequilibrios", ha señalado Linde en una Comisión en el Senado sobre la internacionalización de la economía española.
Linde ha considerado que la "gradual mejora" de las cifras de PIB que se ha registrado en los últimos meses ha ido acompañada de una "corrección sostenida" de los principales desequilibrios acumulados en la fase económica anterior.
A su parecer, los avances en este terreno han contribuido a que España haya dejado de presentar, según la Comisión Europea, desequilibrios macroeconómicos excesivos, aunque este resultado no debe desviar la atención de la necesidad de adoptar más medidas para profundizar en este camino.
Entre los avances registrados, ha destacado el enderezamiento del déficit con el exterior, que ha pasado de superar el 10% en 2007 a registrar un superávit del 1,5% en 2013 gracias a que la demanda exterior neta ha actuado como un "importante factor amortiguador" del retroceso de la demanda interna.
El dinamismo de las exportaciones españolas, según Linde, ha superado el avance del comercio mundial, ya que la cota española de exportación sobre el total mundial ha aumentado hasta el 2,2% en los últimos cinco años.
El gobernador ha explicado que el buen comportamiento exportador se ha apoyado en las ganancias de competitividad y en la recuperación de la demanda externa y en factores mas estructurales que permiten que este potencial se pueda afianzar a largo plazo, como la diversificación geográfica de las ventas de bienes y servicios a mercados más emergentes.
Por otro lado, Linde ha resaltado que la internacionalización de la economía española también se ha reflejado en su participación creciente en los flujos internacionales de inversión directa, no sólo a través de las entradas de capital extranjero, sino también mediante inversiones de empresas españolas en el exterior.
"España ha pasado a ser emisor neto de inversión directa, en contraste con lo que ha sido nuestra pauta histórica", ha subrayado el gobernador del supervisor financiero, tras asegurar que inicialmente las grandes empresas españolas orientaron sus inversiones exteriores a Latinoamérica para diversificarse después hacia la Unión Europea.
Además, Linde ha indicado que los flujos de inversión directa en España, tras interrumpirse en los momentos de máxima tensión en los mercados, están recuperando ahora los niveles previos a la crisis, gracias a que la mejora de la competitividad y las reformas han elevado "sin duda" el atractivo inversor de la economía.
ADMITE UNA PARTICIPACIÓN REDUCIDA EN ALGUNOS MERCADOS
A su parecer, los avances logrados en la internacionalización de la economía en un contexto "particularmente difícil" subrayan la capacidad competitiva de una parte del tejido productivo español, aunque la participación de España en algunos mercados potencialmente muy dinámicos es aún reducida y se enfrenta a importantes retos en un mundo de "presiones competitivas crecientes y de globalización de canales de producción".
En este sentido, ha recordado que España tiene un gran dependencia importadora de bienes energéticos y de capital, así como un elevado pago neto de rentas al resto del mundo por el alto endeudamiento externo, lo que supone una "restricción permanente" para lograr los superávits por cuenta corriente y de capital que se necesitan para desendeudar la economía.