Con más de cuatro millones y medio de parados y ante la actual coyuntura económica, la renta disponible de las familias está siendo "horadada" y con ello también las posibilidades de compra de seguros, explicó González de Frutos en una entrevista con Efe.
Por eso, la presidente de la patronal cree que las aseguradoras tendrán que seguir adaptando sus políticas para retener clientes y negocio en función de sus capacidades, para lo que será "determinante" la experiencia de cada compañía, sin que necesariamente ello quiera decir bajadas adicionales de precio.
González de Frutos recordó que la alta competencia en el negocio asegurador en España llevó a un importante ajuste de precios en los últimos años "francamente beneficioso" para los clientes, aunque en el caso de las compañías haya supuesto una importante merma de ingresos.
Además, al contrario de lo que podría pensarse, la presidenta de Unespa explicó que el aumento de las tasas de ahorro durante la crisis apenas ha beneficiado a las compañías aseguradoras, para las que a cierre de septiembre el volumen gestionado había crecido sólo un 2% en tasa interanual.
En su opinión, la crisis ha provocado un "cierto miedo" que lleva a la gente a consumir con menor intensidad y a acumular dinero por si la situación empeora. Es decir, que el ahorro, entendido desde el punto de vista de las aseguradoras, no se está dando, porque no se atesora con una finalidad concreta.
Si a eso se suma el "especial apetito" de las entidades financieras por captar liquidez y la falta de "especiales alicientes" que fomenten el ahorro a largo plazo, el negocio de las aseguradoras en este área se complica, añadió González de Frutos.
Mientras tribute igual el rendimiento de una operación hecha en Bolsa de un día para otro que el de una decisión de ahorro a tres años es lógico que mucha gente opte por el menor plazo, en lugar de por el ahorro a largo, en el que las aseguradoras son especialistas, resumió.
Esa especialización obliga además a las aseguradoras a hacer inversiones estables y a muy largo plazo, lo que ha permitido al sector tener un carácter anticíclico y resistir mejor la crisis, argumentó González de Frutos.
Sin embargo, ello no quita para que el sector asegurador junto con el de valores y el sistema financiero tenga que tener una supervisión más coordinada, amplia y que englobe todas las operaciones de las entidades financieras.