Según fuentes del sector sin identificar, ambas compañías habrían mantenido conversaciones informales en las últimas semanas respecto a la posible fusión de los dos laboratorios.
De haber llegado a cristalizar, la compra de AstraZeneca, la décima mayor empresa británica con más de 50.000 empleados repartidos por todo el mundo, se habría convertido en la mayor transacción protagonizada por una compañía de Reino Unido.
En este sentido, el rotativo apunta que Pfizer busca objetivos en los que invertir los cerca de 70.000 millones de libras (más de 85.000 millones de euros) que atesora, ya que su repatriación para distribuirlos entre sus accionistas implicaría el pago de una jugosa factura fiscal.