PNV y PSE han cerrado un acuerdo para el impulso a la economía productiva y la creación de empleo que incluye un Plan para la Reactivación Económica y el Empleo, con unos recursos de 6.290 millones. El pacto contempla un programa de estímulo empresarial a través de avales, un 'Fondo Euskadi' para apoyar nuevas iniciativas empresariales y una propuesta específica de empleo para parados de larga duración y jóvenes sin experiencia laboral.
Esta es una de las bases del preacuerdo alcanzado entre ambas formaciones para "conseguir una Euskadi más moderna, solidaria, sostenible y competitiva".
Ambos partidos coinciden en compartir que, en estos momentos, la prioridad en Euskadi es incentivar la economía, facilitar crédito y ayudar a las empresas, y crear empleo.
Por ello, adquieren el compromiso de impulsar un Plan para la Reactivación Economíca y el Empleo, que tendrá carácter global y que integrará los esfuerzos del Gobierno vasco, las diputaciones y los ayuntamientos.
PNV y PSE han acordado que a este Plan de Reactivación Económica y Empleo se destinará para los años 2014, 2015 y 2016, además de los recursos ya previstos en el presupuesto prorrogado, el 50 por ciento de los recursos que se obtengan de la reforma fiscal y lucha contra el fraude previstos en este acuerdo, y otras medidas.
En concreto, el Plan de Reactivación Económica y Empleo 2014-2016 estará dotado con 5.740 millones de euros, de los que 1.860 millones de euros corresponderán a avales y garantías. También se añadirán el 50 por ciento de las dotaciones correspondientes al Gobierno vasco provenientes de la reforma fiscal, lucha contra el fraude y de otras medidas recogidas en este documento. Esta cantidad ascenderá a 550 millones. En conjunto, el volumen total de recursos afectos a dicho plan ascendería a 6.290.
PARADOS
Entre las actuaciones de ese plan, se incluye una propuesta específica de Empleo dirigida a los parados de larga duración y a los jóvenes sin experiencia laboral, con ayudas a la contratación de estos colectivos y con especial incidencia en las comarcas con más tasa de desempleo.
También se contempla un programa de Estímulo Empresarial para asegurar financiación, a través de avales, a las empresas con proyectos solventes que creen empleo en Euskadi, que impulsen contratos de exportación o estén en fase de abordar proyectos de inversión de alto valor añadido en I+D+i.
En este capítulo también se incluye un impulso anticíclico a la investigación y al desarrollo, con el objetivo de poder "competir por el valor añadido que crea el conocimiento". En este sentido, entienden que el crecimiento del sector económico solo será posible sobre la base de "un mayor conocimiento aplicado al sector productivo".
PLAN INTERINSTITUCIONAL
Por otra parte, se contempla un Plan interinstitucional territorializado de inversiones en infraestructuras generales estratégicas que sean generadoras de empleo y se dará continuidad a iniciativas previstas anteriormente.
Además, se plantea establecer un "Fondo Euskadi" para dotar de capital a nuevas iniciativas empresariales, con un tratamiento fiscal específico. Asimismo, se apuesta por impulsar iniciativas para que patronal y sindicatos alcancen acuerdos sobre negociación colectiva.
También se acuerda proseguir, al menos con la misma dotación económica, con la potenciación específica y particular de los programas Renove, en aquellas parcelas de actividad económica y comercial que "resulten particularmente afectadas por la crisis económica o por otras políticas públicas prioritarias". El objetivo es "ayudar al mantenimiento y fomento de la actividad de los sectores industriales y comerciales de la Comunidad Autónoma".
"DELICADA SITUACIÓN"
En la introducción del texto del preacuerdo se hace alusión a que la sociedad vasca vive una "delicada" situación que, "sin ser tan intensa" como la de otras comunidades corre el riesgo de "llevarse por delante buena parte de las conquistas alcanzadas en estos años de democracia y autogobierno".
En este sentido, se alude a la "grave" crisis económica y financiera que se padece a nivel europeo y que atribuyen a una "negligente" actuación de la banca a nivel internacional y a una "falta de reglas y controles de la política a la actividad de ésta y de la economía en general".
En el texto, se afirma que se han articulado políticas "restrictivas y de recortes" por parte de los gobiernos europeos, con "grandes sacrificios" pero no parece "atisbarse" la salida de la crisis y la recuperación será "lenta y dolorosa para muchos ciudadanos". A su juicio, las recetas aplicadas en Europa y en España han recortado "gravemente" el Estado de bienestar y el equilibrio social.
En este sentido, las dos formaciones aseguran "no compartir ese camino" y, por ello, apuestan por adoptar las medidas necesarias para hacer "frente a estas políticas y sostener el Estado de Bienestar, abordando las reformas necesarias para garantizar su futuro".
INCENTIVACIÓN DE LA ECONOMÍA
Por ello, apuestan por impulsar en todas las administraciones competentes políticas "anticíclicas" y apostar "decididamente por la incentivación de la economía, la creación de empleo, con especial atención a los jóvenes y parados de larga duración".
En este punto, aluden a que la reforma laboral y el fin de la vigencia de los convenios pactados puede abrir "un período de gran conflictividad laboral", ya que no ha sido posible, hasta el momento, un acuerdo entre empresarios y sindicatos "para resolver de forma pactada esta cuestión".
"Euskadi no es ajena a esta realidad. No somos una isla en este mundo globalizado, si bien el mayor músculo industrial de nuestro tejido productivo y la decidida acción política de apoyo a las empresas, impulsada en las últimas legislaturas por los poderes públicos, han permitido a Euskadi sobrellevar esta situación con mayor solvencia que otras comunidades", añaden.
No obstante, apuntan a que esta realidad no significa que la situación "escape a la preocupación, máxime cuando miles de familias vascas sufren en carne propia las consecuencias de la recesión, del desempleo y de la pérdida de horizontes de bienestar".
PNV y PSE han apuntado que la caída del 1,9 por ciento del PIB en los primeros meses del año y los más de 150.000 parados en Euskadi son, "la expresión más dramática de una política económica equivocada" y de una crisis que está provocando "grandes dificultades a empresas y familias para sacar adelante sus proyectos".
Ambas formaciones indican que este "crítico" panorama obliga a las administraciones públicas a impulsar "políticas anticíclicas y a promover decididamente medidas que incentiven la actividad económica y la creación de empleo, con especial atención a los jóvenes y parados de larga duración".
Tras aludir a que la inmensa mayoría de los gobiernos de las diferentes administraciones de Euskadi se encuentran en minoría, han señalado que en los momentos en los que "más aprieta la crisis", son "más necesarios los acuerdos y las políticas" que susciten "consensos amplios entre agentes políticos, económicos y sociales".
Todo ello es lo que les ha llevado, según precisan, a consensuar unas bases para "Acuerdos de País en Beneficio de la Ciudadanía Vasca", que "permitan salir de la crisis, crear empleo y avanzar hacia una sociedad más cohesionada, solidaria, sostenible y competitiva". Ambos partidos coinciden en que la consecución de estos objetivos requiere de un acuerdo "global, de una visión de conjunto".