El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy en el Congreso que el Consejo de Ministros del próximo viernes aprobará un decreto ley que abordará la reforma de Aena y la liberalización de los 47 aeropuertos que la integran.
De la actual Aena, que también controla la navegación aérea, se desgajará la gestión de los aeropuertos, que será privatizada en un 49%, lo que podría llevarse a cabo a través de su salida a bolsa.
Esta es una de las opciones que baraja el Ministerio de Fomento, que también analiza la posibilidad de colocar ese capital entre inversores institucionales.
Una vez que la futura Aena Aeropuertos sea parcialmente privatizada, el aeropuerto de Barajas y El Prat serán sacados a concurso público para su gestión privada en régimen de concesión.
Con el mismo esquema también podrían ser privatizados otros grandes aeropuertos, mientras que el resto seguirá gestionado de forma directa por Aena o sociedades filiales.
Fomento quiere que la nueva sociedad Aena Aeropuertos esté creada antes del 28 de febrero de 2011 y espera haber colocado entre inversores privados el 49% de su capital antes de un año, en tanto que el resto del nuevo modelo estaría completado antes de que acabe la legislatura.
El departamento que dirige José Blanco calcula que este proceso privatizado podría reportar al Estado entre 8.000 y 9.000 millones de euros, una vez descontada la deuda de 12.000 millones de Aena.
En Fomento aseguran que el ministro ya ha recibido "más de media docena de llamadas" para interesarse por la concesión de los dos aeropuertos principales, aunque públicamente sólo Abertis y Ferrovial han manifestado su interés, en tanto que ACS recordó que no le interesan los aeropuertos ya construidos.
El régimen de concesión permitirá al gestor privado establecer todas las tarifas de explotación del aeropuerto, salvo las de aterrizaje, pasajeros y seguridad que continuarán reguladas por Aena Aeropuertos.
Todos los trabajadores de Aena Aeropuertos mantendrán sus derechos laborales, aunque los sindicatos CCOO y UGT entienden que la privatización parcial de esta empresa estatal es una mala noticia para sus empleados.
También se crearán Comités de Coordinación Aeroportuarios entre el Estado y las comunidades autónomas para coordinar las competencias, crear comités de desarrollo de rutas aéreas, garantizar la conexión con el aeropuerto, así como las competencias acústicas, urbanísticas y medioambientales.
Entre el sector empresarial ha sido bien recibido el nuevo modelo aeroportuario, mientras que entre la clase política, sobre todo la catalana, las reacciones han fluctuado entre el escepticismo de ICV o ERC y la prudencia expresada de CiU y PSC.
Con el decreto ley del viernes se dará finalmente desarrollo a una reforma del modelo aeroportuario que fue anunciada en agosto de 2008 por la entonces titular de Fomento, Magdalena Álvarez.
En aquel momento se dijo que la privatización de la gestión de aeropuertos no llegaría al 30% de su capital y que la Comunidad de Madrid y Cataluña tendrían un papel determinante en la gestión de Barajas y El Prat, respectivamente.