La facturación de la compañía propietaria de marcas como Braun, Pantene o Ariel alcanzó en su segundo trimestre fiscal, que concluyó el pasado 31 de diciembre, los 22.280 millones de dólares (16.245 millones de euros), un 0,5% más que los 22.175 millones de dólares (16.168 millones de euros) de hace un año.
En los seis primeros meses de su año fiscal, P&G obtuvo un beneficio neto de 6.455 millones de dólares (4.706 millones de euros), un 6,1% menos que en el mismo periodo del año anterior, pese a que sus ventas subieron un 1,3%, hasta 43.485 millones de dólares (31.704 millones de euros).
El consejero delegado de la compañía, Bob McDonald, destacó que los resultados del segundo trimestre han sido tal y como esperaban, y aseguró que están en el buen camino para lograr sus objetivos de aumentar entre un 3% y un 4% sus ventas orgánicas y entre un 5% y un 7% su beneficio por acción en el conjunto del ejercicio fiscal.
"Esperamos un fuerte crecimiento de los beneficios en la segunda mitad del año fiscal impulsado por un crecimiento sólido de los ingresos, una moderación de los vientos en contra derivados del cambio de divisas y los ahorros en la productividad", añadió.