El resultado de mayo fue el mejor desde el pasado noviembre, cuando la producción de acero se hundió ante las perspectivas de entrar en la actual recesión económica mundial, según los datos divulgados por la entidad.
La mayor potencia de América Latina en acero ha acumulado en los cinco primeros meses del año la producción de 8,6 millones de toneladas, con un descenso del 41% en relación al año pasado.
Brasil es el decimoquinto exportador mundial de acero. En la balanza comercial del país los productos metalúrgicos ocupan el tercer lugar entre los bienes más vendidos al exterior, con una cuota cercana al 10%.
No obstante, con la crisis y la disminución de la demanda de la industria mundial por acero, las ventas brasileñas cayeron abruptamente.