Eliminado el efecto calendario -la diferencia de días hábiles de un mismo mes en los distintos años- la variación interanual del Índice de Producción Industrial (IPI) fue positiva en julio, del 0,5%, aunque 2,7 puntos inferior a la del mes anterior.
En los siete primeros meses del año, la tasa media del IPI es un 1,4% superior a la del mismo periodo del año pasado, tanto si se corrige el efecto calendario como si no.
Todos los sectores, excepto la energía, presentan tasas interanuales negativas.
El sector de los bienes de equipo fue el que más influyó en la caída de la producción industrial, al tener una tasa un 6% inferior a la de 2009, principalmente por el descenso de la fabricación de elementos metálicos para la construcción y de otra maquinaria de uso general.
Esa contracción se compensó con la fabricación de componentes para vehículos de motor y la de vehículos de motor, que registraron tasas positivas, aunque menores que en meses anteriores.
El sector de los bienes de consumo no duradero también se contrajo en julio (el 1,8%) por la menor producción de bebidas y productos lácteos.
Del lado contrario, el sector energético creció el 5,7% respecto a hace un año, debido al aumento del refino del petróleo y de la producción, transporte y distribución de energía eléctrica.
Diez comunidades autónomas registraron variaciones interanuales negativas en julio, entre las que el INE destaca la de las Islas Baleares (12,3%) y Madrid (10,8%).
Mientras, Asturias fue la que registró la mayor tasa anual positiva (16,1%).