"Mi Gobierno acoge con gran satisfacción el acuerdo", ha dicho Rajoy durante su comparecencia en el Debate sobre el estado de la Nación, donde ha explicado que este acuerdo constata la voluntad de Grecia de seguir cumpliendo con las normas y acuerdos pactados.
Asimismo, demuestra que Grecia está dispuesta a mantener el programa de asistencia bajo la supervisión del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea (CE), a las que se ha referido como "las instituciones" evitando la palabra Troika, y de concluirlo con éxito.
"No ha sido fácil llegar", ha dicho Rajoy, tras recordar que a un lado estaban las reglas y los compromisos que exige la zona euro y por otro de la pretensión de un país de redefinir su deuda y su política.
Según el presidente, tras tres reuniones del Eurogrupo y una del Consejo Europeo, las negociaciones han acabado en el mejor espíritu europeísta y han permitido garantizar que se cumplirán los compromisos pactados y se aplicará cierta flexibilidad. "No podía ser de otra manera y es bueno que lo sepan los ciudadanos", ha añadido.
El jefe del Ejecutivo ha asegurado que el euro es uno de los componentes más importantes del proyecto de integración europeo y ha recordado que la pertenencia a la moneda única obliga a asumir unos derechos y unas obligaciones, sobre todo las que garantizan su sostenibilidad.
"NO ES UN CLUB A LA CARTA"
Tal y como ha dicho Rajoy, "no se trata de un club a la carta", sino que las reglas han de ser observadas y asumidas por todos, por lo que "no hay cabida para imposiciones ni medidas unilaterales", puesto que los principios de la eurozona son de "responsabilidad y solidaridad", que son las "dos caras de una misma moneda".
A su parecer, la Unión Europea ha actuado "con gran solidaridad" hacia Grecia, pero esa solidaria exigía también una "idéntica responsabilidad" al Gobierno griego. "Por eso celebro este acuerdo, es muy bueno para Europa y para el futuro de Europa", ha concluido.