Realia ha ajustado alrededor de un 35% el precio de sus viviendas desde el inicio de la crisis, pero está dispuesta a rebajarlo hasta un 40% con el fin de comercializar el millar de pisos que tiene en 'stock', según indicó el presidente de la compañía, Ignacio Bayón.
"Si para vender viviendas tengo que llegar hasta ajustes del 40%, lo haré, la empresa está preparada para ello", indicó Bayón, quien señaló la "complicada competencia" que las entidades presentan a la hora de comercializar pisos.
La inmobiliaria controlada por Bankia y FCC confía en vender entre 130 y 180 viviendas este año, de las que 34 se han comercializado en los tres primeros meses del ejercicio, según avanzó su presidente, pese a reconocer que la situación del mercado residencial está "bajo mínimos" por la "restricción del crédito y la incertidumbre de la coyuntura económica".
Bayón concretó que los ajustes de precio se realizarían en los pisos en 'stock', no en los de nueva promoción, "que ya se construyen a precios actuales de mercado".
En la misma línea, Realia ha ajustado casi a la mitad (en un 46,8%) el valor de su cartera de 3,3 millones de metros cuadrados de suelo, para que esté "en la mejor posición para competir una vez que el mercado se recupere".
REFINANCIACIÓN.
El negocio de suelo y promoción de viviendas constituye alrededor del 30% de Realia, que ya ha iniciado "conversaciones" con sus entidades financieras para refinanciar la deuda de 850 millones de euros ligada a esta actividad y que vence este año.
Esta refinanciación y la reducción de su actual deuda total de 2.182 millones de euros constituye uno de los principales objetivos de la compañía para 2012.
Otro de los fines del grupo es seguir potenciado el su principal actividad, el alquiler de patrimonio, fundamentalmente en Madrid y París, mediante la rotación de activos y la puesta en explotación de otros nuevos, como el centro comercial que promueve en alianza con Carrefour en Santiago de Compostela.
FUSIONES.
En este sentido, Bayón aseguró que Realia está "abierta" a estudiar "cualquier sugerencia interesante" de fusión que reciba. Tras indicar que actualmente "no piensa ninguna operación", indicó que debería tratarse de una "firma europea, patrimonialista y sin problemas de deuda".
Para el presidente de Realia, eventuales integraciones entre firmas inmobiliarias europeas "no serían malas", dada la actual coyuntura del sector, pero siempre que sirvan para "sumar sinergias y no para tapar miserias".