¿Estamos realmente saliendo de la crisis? Razones para desconfiar

ANDRÉS VILLENA OLIVER 25/11/2009 00:00

Los economistas suelen ser pésimos profetas, pero algunos de estos venían desde hace muchos años alertando sobre lo que finalmente ha sucedido. Es el caso del "gurú" liberal Nouriel Roubini. Este economista acertó en sus precisiones sobre lo que ha sucedido y no cree que lo peor haya pasado aún. Ni mucho menos. El próximo hundimiento podría venir por el estallido de una nueva burbuja: la de los precios del petróleo. Los culpables, los de siempre: especuladores que habrían desviado su dinero hacia el mercado de las materias primas. Un asunto demasiado peligroso.

Una bomba

Pero no hay que viajar muy lejos para tratar de entender lo que está pasando. El Catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Sevilla, Juan Torres López, lleva varios años explicando lo que iba a ocurrir y lo que puede llegar a suceder a pesar de las medidas aplicadas. Torres, que ha publicado "La crisis financiera. Guía para entenderla y explicarla", utiliza una sonora metáfora para ilustrarlo: "Todo el dinero que se ha inyectado en los bancos no ha llegado a las familias; está ahí y tiene que salir en algún momento, se tiene que "metabolizar". ¿Qué pasaría si te comieras ocho tortillas de patatas en una noche? Pues esa es la situación en la que nos encontramos".

Peligrosos antecedentes

"Los bancos están utilizando ese dinero para limpiar sus balances. Pero para ello están procediendo a casi los mismos métodos que con las "hipotecas basura". No se sabe lo que va a pasar. Podríamos incluso entrar en una era de inflación mundial parecida a la de Alemania en los años 30. Además, de producirse una nueva caída de la economía, ya nada de lo que se ha hecho antes podría servir de nuevo, nada tendría credibilidad".

El fantasma

Estos especialistas -provenientes muchos de ellos de la derecha más liberal y otros, como Torres, de la izquierda más crítica- coinciden en que el mundo financiero se ha prestado a una auténtica "orgía". No es casualidad que el Fondo Monetario Internacional esté pidiendo a los bancos que renuncien a las inyecciones de liquidez: da toda la sensación de que estas entidades financieras se han volcado de nuevo en actividades profundamente especulativas con la esperanza de que los Estados no las dejarán caer. El fantasma de Lehman Brothers recorre ahora mismo el mundo entero.

Desconfianza

A.V.

No obstante, el variable comportamiento de los sujetos económicos convierte las previsiones en presagios profundamente inseguros. El propio Juan Torres nos cuenta que, para el caso español, "un repunte del PIB podría suponer un alivio, aunque también podría producirse una nueva caída". Estamos a ciegas. Las reuniones del G20 podrían haber sido solamente iniciativas dirigidas a restituir la seguridad del inversor sin cambios reales en el sistema financiero, causante principal de la caída anterior. ¿Estamos creciendo con los mismos motores con los que caímos? Razones para la desconfianza.