En rueda de prensa en Rabat, donde ha organizado junto a la patronal marroquí un foro empresarial que han inaugurado los presidentes del Gobierno de España y Marruecos, Rosell ha dicho entender que Rajoy quiera tener "toda la información" y "la letra pequeña" antes de decidir si recurre o no a esa ayuda. Esto es, conocer al detalle cuáles son los "plazos", las "condiciones" y los "intereses" bajo los cuales se concedería esa ayuda.
El presidente de la CEOE no ha querido entrar a valorar si la petición de ese rescate sería bueno o malo para España. "Vamos a dejar al que tiene la mejor información que haga lo que tenga que hacer y que luego lo explique cuando sea oportuno", ha señalado el presidente de la patronal.
A Rosell también se le ha preguntado por el mensaje de unidad que ayer salió de la Conferencia de Presidentes en favor de reducir el déficit público. Tras subrayar que el principal problema de España es el "control del déficit", ha advertido de que nuestro país no tiene "más alternativa" que reducir el déficit público porque "dependemos de los mercados que nos prestan dinero".
Por tanto, cualquier declaración procedente de cualquier administración española, sea estatal, autonómica o local, que diga que ese compromiso se va a cumplir, que nos vamos a "dejar prácticamente la vida en ello es bueno".
Rosell ha asegurado que durante sus conversaciones con las autoridades y empresarios marroquíes ninguno de ellos le ha mostrado preocupación por el anuncio del presidente de la Generalitat catalana, Artus Mas, de convocar un referéndum para que los catalanes decida si quieren tener un Estado propio.
"Lo que nos han preguntado es si teníamos entradas para el partido del domingo", ha bromeado en alusión al Barça-Madrid que se disputará en el Camp Nou.
El foro empresarial organizado hoy por las patronales de España y Marruecos en Rabat buscaba abrir oportunidades de negocio para las empresas españolas principalmente en las áreas de las infraestructuras, agua y energías renovables después de que recientemente Acciona consiguiera, en consorcio con una compañía saudí, el mayor contrato conseguido jamás por una empresa española para construir la mayor planta termosolar del mundo, por un importe de unos 700 millones de euros.
Las exportaciones a Marruecos han crecido más de un 22 por ciento solo en el primer semestre de este año y Rosell ha destacado que el cambio más importante que se está dando en las relaciones económicas entre ambos países tiene que ver con el desembarco de pequeñas y medianas empresas españolas en el país alauí. Solo este año, unas 100 pymes se han establecido en Marruecos, una cifra impensable hace algún tiempo.