Sánchez cree que las encuestas reflejan el "desplome" del PP y que el proceso de renovación del PSOE ha frenado su caída

EUROPA PRESS 03/11/2014 14:05

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha asegurado este lunes en Alicante, cuando se cumplen sus primeros cien días al frente del partido, que las encuestas están reflejando el "desplome" del PP y, en especial que el "proceso de renovación" del partido socialista ha frenado "el golpe que estaba sufriendo estos años, desde la salida del Gobierno".

A su juicio, las encuestas reflejan "que estamos empezando a recuperar" y se ha mostrado "bastante optimista" sobre las "potencialidades" y "posibilidades" del partido socialista, al ser preguntado por cómo afronta el PSOE la fragmentación de la izquierda. Así, ha considerado que el partido debe "construir una alternativa de izquierdas que mire al centro, al PP y Rajoy" y ha augurado que lo van a lograr. "Dependerá de nosotros que podamos aglutinar el voto de la izquierda", ha subrayado.

En esta línea, se ha mostrado convencido de que si consigue "convencer a la opinión pública" de la necesidad de un cambio y "que pasa por el PSOE", su partido volverá a gobernar España, "más pronto que tarde". "Es decir, en noviembre de 2015", ha dicho.

Sánchez, que ha ofrecido una conferencia al pleno del XVII Congreso de la Empresa Familiar, se ha sometido a las preguntas de los empresarios y ha contestado desde "la humildad" al ser cuestionado por cómo afronta el PSOE la fragmentación de la izquierda.

RECHAZO A UN GOBIERNO DE UNIDAD NACIONAL

Asimismo, Sánchez ha zanjado con un "no" la posibilidad, planteada por los empresarios, sobre un "gobierno de unidad nacional PP-PSOE" tras las elecciones de 2015. No obstante, el secretario general del PSOE sí ha considerado que se debe "recuperar el Parlamento como centro de decisión legislativa" porque "hoy no lo es", y por ello, ha reclamado que "la política tiene que recuperar el espíritu de pacto". "Necesitamos pactos para nuestro futuro, como el educativo, energético y constitucional", ha sostenido.

Así, ha estimado que "no solo queremos afrontar una renovación de nuestro pacto constitucional, para resolver la crisis territorial que se está viviendo en Cataluña si no que también necesitamos renovarlo para regenerar la vida democrática". "Por eso, más allá del gran acuerdo, que no comparto, sí que creo que es importante que distintos partidos, sin lugar a dudas los dos grandes partidos, afrontemos pactos fundamentales para el futuro económico y social de nuestro país", ha indicado.

TRANSICIÓN ECONÓMICA

En su discurso ante el pleno del Congreso, Pedro Sánchez ha solicitado abordar una "transición económica" para salir de la crisis "en la que entramos hace seis años" y que debe resolver "el alto endeudamiento privado, la baja competitividad y el paro y la precariedad laboral". Factores a los que, según ha dicho, "se han unido dos nuevos problemas, el endeudamiento público y la desigualdad".

Sobre ese último punto, Sánchez ha reafirmado que existen en España 2,5 millones de niños pobres y el 40 por ciento de los trabajadores que no pueden afrontar imprevistos mensuales "con su sueldo", "sin contar con los tres millones que no pueden llevar ingresos a su hogar". Ha manifestado que la transición económica precisa de "tenacidad y coherencia" y ha aventurado que "no tiene como varita mágica un mero recambio de Gobierno".

Sánchez ha desgranado, así, los cinco puntos de la transición económica del PSOE. "Cinco agendas del cambio" englobadas en la reindustrialización, la reforma fiscal, un nuevo estatuto de los trabajadores, la democracia económica y la reforma energética, ha descrito.

"Invertir en la reindustrialización de España es apostar por un país más competitivo, más exportador y que crea más empleo y de mayor calidad", ha defendido Sánchez, que ha recordado que la Comisión Europea planteó que la industria fuera el 20 por ciento en 2020, "y ese es neutro compromiso creando 600.000 empleos adicionales".

Sobre la reforma fiscal, Sánchez ha afirmado que "no aguanta más parches" y es la "reforma estructural pendiente". Además, ha insistido en que se necesita un nuevo estatuto de los trabajadores que se adapte a las circunstancias actuales, "porque hemos cambiado mucho" desde la aprobación del Estatuto en 1980.

En relación a la situación energética, Sánchez ha estimado que es "confusa" la política energética del Gobierno en los últimos años porque "no ha habido una reflexión estratégica" y "seguimos teniendo una elevada dependencia y unos costes energéticos elevados" que "lastran la competitividad".

Finalmente, ha abordado la democratización de la economía para "evitar la concentración del poder económico en sectores estratégicos para el día a día de muchas familias y pequeños empresarios y la ausencia de competencia". Por ello, Sánchez ha dicho que la competencia es "el principio básico de una economía moderna y de una sociedad justa. Y creo que el papel del Estado debe ser ese", que la competencia "sea real y con garantías".