El sector del ladrillo debe 300.000 millones

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 25/01/2010 17:40

"Lamento no dar buenas noticias", apuntó durante su participación en el XXVIII Coloquio Nacional de la Asociación de Promotores y Constructores de España (APCE), en el que criticó que "no se están poniendo los mimbres necesarios para solucionar el aturdimiento financiero del sector", que "se está jugando su viabilidad", cuestión que, a su juicio, "pasa por algo más complejo que echarle las culpas al sistema financiero" y "tiene que ver con su proceso de reestructuración".

Según recordó el presidente de la AHE, la deuda financiera de los promotores asciende a 325.000 millones de euros, un 11% más que hace dos años, lo que implica unos intereses de 15.000 millones de euros, cifras que, según González, "no pueden pagar" los promotores.

"Ello está afectando al rating de las entidades" en un momento en el que "el problema de la liquidez no está solucionado", ya que "el sistema no puede asumir la deuda inmobiliaria". Así pues, advirtió de que "las refinanciaciones posteriores estarán comprometidas". "No se puede hacer borrón y cuenta nueva", añadió.

En este sentido, el presidente de la AHE hizo un llamamiento: "Tenemos que solucionar el 'stock', sobre todo en activos que no son productivos, pero hay que buscar una medida que tiene que ver con el ICO, el Banco de España o los gobiernos para solucionar la financiación del sector". En otras palabras, González transmitió que "hay que ver qué se hace con el stock, aunque no es lo fundamental que hay que poner encima de la mesa, sino qué hacer con el sector".

Además, el presidente de la AHE apuntó que las informaciones que se generan sobre la evolución de los precios de la vivienda están provocando una "pérdida de referencias de valor y una contención adicional de la demanda", pese a lo cual el mercado "se está moviendo", como demuestra, según apuntó, una mejora en la subrogaciones.

Inflar la cartera

El plan extraordinario de inversión en infraestructuras de 15.000 millones de euros que ultima el Ministerio de Fomento y el resto de programas públicos de inversión en infraestructuras que promueven distintas administraciones y países contribuirán a evitar que se "sequen" las carteras de las empresas del sector de construcción de obra civil.

"Las constructoras de infraestructuras en la actualidad viven fundamentalmente de la ejecución de la cartera de obra lograda antes de la crisis, y los planes de estímulo amortiguarán la posibilidad de que se produzca un eventual desfase entre la conclusión de esos proyectos y la consecución de otros nuevos", apuntó la socia de KPMG y responsable de la firma en materia de Infraestructuras, Gobierno y Salud, Elena Pisonero.

Así, las empresas del sector consideran "importante y necesario" el plan que ultima el departamento que dirige José Blanco y los que también anuncian otras administraciones, pero reconocen que no servirán para asegurar la actividad del sector ni "determinar su tendencia" a "largo plazo", según se desprende de las encuestas realizadas por KPMG a grupos constructores para elaborar su 'Informe Global de Construcción 2009'. Por ello, el estudio destaca la importancia de que los grupos del ramo sigan compitiendo por proyectos a escala internacional, si bien de una forma más selectiva, dada la actual coyuntura.