La Sección Novena de la Sala de lo Contencioso Administrativo levantó la suspensión cautelar que pedía el Ayuntamiento madrileño en el recurso que presentó la semana pasada contra el proyecto de modificación de estatutos "al haberse resuelto todas las cuestiones planteadas tras la comparecencia y audiencia de todas las partes".
No obstante, el Ayuntamiento, que no recurrirá la decisión, recordó que el proceso "sigue abierto" y confió en que el Tribunal decida sobre el fondo del recurso contencioso administrativo planteado.
El TSJM suspendió el lunes, en respuesta al recurso presentado por el Ayuntamiento, de forma cautelarísima (sin escuchar a las partes) cualquier acción dirigida a aprobar los nuevos estatutos, mientras que ayer escuchó a las dos partes (Consejería de Economía de la Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Madrid).
En el auto de hoy, el TSJM justifica el levantamiento de la suspensión al considerar que mantener las medidas cautelares no altera de por sí ni el proceso electoral de la entidad ni la representación del Ayuntamiento en los órganos de gobierno de Caja Madrid.
De esta forma, añade, "no procede entrar en el examen de las restantes circunstancias alegadas" por el Ayuntamiento relativas a la prevalencia de sus intereses o de los de la propia entidad financiera y de los impositores residentes en el municipio de Madrid.
La cuestión de inconstitucionalidad que plantea el Ayuntamiento del proceso de reforma de estatutos habrá de solicitarse por tanto, según el TSJM, sobre la orden que dicte la Consejería de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid una vez que la Asamblea vote los estatutos, es decir, una vez que culmine el proceso y no antes.
Tras conocer el auto, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, mostró su satisfacción porque, en su opinión, el TSJM ha ratificado la "legalidad y constitucionalidad" de la nueva Ley de Cajas y ha "desestimado" las pretensiones del Ayuntamiento en Caja Madrid.
Caja Madrid, por su parte, consideró "muy positiva" la decisión del tribunal porque, destacó, así se permitirá "decidir" a la Asamblea General de la caja, "órgano máximo y supremo de representación de la entidad cuya voluntad está representada por los miembros del Consejo de Administración".
La entidad presidida por Miguel Blesa confió además en que la decisión que tome la Asamblea el próximo lunes -la aprobación o el rechazo de los nuevos estatutos- sea "respetada por todos, sin imposiciones por parte de nadie".
La Asamblea General de la entidad someterá a votación el proyecto de estatutos que le remitió el Consejo de Administración "por imperativo legal" este lunes y está por ver si les dará el visto bueno o no, después de que la mayoría de los representantes del Consejo haya mostrado su rechazo al nuevo texto.
En el caso de que no se aprueben, según la normativa regional de cajas vigente, la Comunidad de Madrid podría imponerlos.