En concreto, el impulso de las ventas minoristas se debió al incremento en un 5,1% de los productos no alimentarios, fundamentalmente por el incremento del 8,5% del volumen de ventas de ropa y calzado, y de un 2,3% del volumen de ventas de los alimentos, bebidas y tabaco.
En el conjunto de la Unión Europea (UE), las ventas del comercio minorista aumentaron un 3,5% en septiembre en comparación internaual, mientras que crecieron un 0,3% mensual, frente al 0,5% registrado en agosto.
Entre los Veintiocho, el mayor incremento internaual de las ventas minoristas en septiembre correspondió a Rumanía (+14%), de Malta (+9,8%) y de Irlanda (+8,2%), mientras que se registraron descensos en Luxemburgo (-25,3%) y Suiza (-0,3%).
En comparación agosto, los mayores incrementos mensuales se observaron en Irlanda (+1,4%), en Dinamarca (+1,3%) y en Luxemburgo (+1,3%), mientras que se contabilizaron descensos en Reino Unido (-2,2%), en Croacia (-1,9%), en Lituania (-1%) y en Letonia (-0,6%).
En España, las ventas minoristas crecieron un 2,5% en septiembre en comparión con el mismo periodo de 2016 y hasta un 0,4% en comparación mensual.