Zapatero manifestó este compromiso durante un almuerzo celebrado en el Palacio de La Moncloa con la Comisión Ejecutiva de la CEOE y al que también asistieron los ministros de Economía, Trabajo, Industria y Vivienda.
Durante el citado encuentro, que se prolongó durante casi tres horas, los representantes de la patronal insistieron en la necesidad de financiación de las empresas y las reformas estructurales, según un comunicado remitido por Moncloa.
Concretamente, demandaron que se ahonde en la reforma laboral, que se defienda la unidad de mercado, así como que se desarrolle la transposición de la Directiva de Servicios.
Tras comprometerse a ampliar, si es necesario, las líneas de crédito del ICO, el presidente explicó a la patronal que las entidades financieras están aún "preparando sus estructuras" para poner a disposición de las empresas las diversas líneas de crédito abiertas para afrontar la crisis, que ascienden a 30.000 millones de euros.
Sobre la reforma laboral demandada por los empresarios, Rodríguez Zapatero apuntó que el Gobierno cree conveniente que los agentes sociales alcancen cuanto antes un acuerdo en la negociación colectiva, para proseguir después con las conversaciones del diálogo social.
El citado encuentro, al que estaba invitado todo el Comité Ejecutivo de la CEOE, compuesto por 34 personas, se ha producido después de que el pasado 21 de enero la Junta Directiva de la patronal acordase pedir una reunión urgente con el presidente del Gobierno para expresarle su preocupación por la "grave" situación económica y presentarle las propuestas empresariales.
Por su parte, Zapatero señaló ayer que en esta reunión hablaría con los empresarios de mejorar las líneas de crédito del ICO y de cerrar un acuerdo sobre diálogo social que, apuntó podría alcanzarse la próxima semana.
Precisamente, el jefe del Ejecutivo informó en este almuerzo a los empresarios de que el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, presidirá el próximo lunes la Comisión de Seguimiento y Evolución del Diálogo Social, en la que se abordarán las medidas para el mantenimiento, la generación del empleo y la protección de los desempleados.
Zapatero recordó ayer que en el diálogo social el Ejecutivo se ha marcado dos objetivos: mejorar las circunstancias de los desempleados y "poner encima de la mesa" nuevas medidas de fomento del empleo.
Entre las medidas a las que se refirió el presidente, que podrían aprobarse la semana que viene, destaca la posibilidad de que se puedan utilizar las prestaciones por desempleo que le quedan por percibir a un parado como bonificaciones para su contratación indefinida.
Zapatero mencionó otra referida a "fomentar y estimular la contratación a tiempo parcial".
Antes del almuerzo, y en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, apuntó que tanto los agentes sociales como el Gobierno deben tomar con "generosidad y responsabilidad" sus decisiones en las negociaciones del diálogo social.
Fernández de la Vega se mostró asimismo convencida de que "antes o después habrá acuerdo" con los agentes sociales, y subrayó que el diálogo social es y seguirá siendo un "eje fundamental" de su política.
Tras el almuerzo con Zapatero, representantes de la CEOE se reunieron esta tarde con dirigentes de CCOO y UGT, según anunció esta mañana el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, en el Foro de la Nueva Sociedad.
Sobre esta reunión, fuentes de CCOO explicaron a EFE que no se ha alcanzado ningún acuerdo sobre la Negociación Colectiva, ya que "las cosas están difíciles".
Por ello, ambas partes acordaron darse una semana de prórroga para acercar posturas, según las fuentes de CCOO.
En cuanto a la reunión del próximo lunes entre los agentes sociales y el Gobierno para debatir las medidas propuestas por el Ejecutivo para incentivar el empleo, las mismas fuentes aseguraron que, aunque "mantienen discrepancias", habrá que esperar hasta la citada reunión para saber si las apoyarán o no.