Israel lanzará su primera nave espacial en diciembre para conquistar la Luna

eltiempohoy.es 11/07/2018 14:05

Son muchos los países que innovan e investigan cada día en nuevos dispositivos para ser mandando a la luna. La llegada del hombre a la Luna es uno de los mayores logros de la humanidad, y son muchos los que se plantean ahora la idea de hacerlo como una actividad turista (que no está al alcance de muchos).

Conocer cada vez más cosas de nuestro satélite es algo que ha preocupado a países como Estados Unidos, Rusia o China. Ahora es un nuevo país el que se suma la conquista de la luna: Israel.

Una iniciativa, de carácter privado, que junto con la asociación a la colaboración con la Industria Aeroespacial de Israel, ha anunciado que lanzarán a finales de año su primera misión espacial. El proyecto que han creado se llama Spaciel. Se estima que su coste ronda los 95 millones de dólares, y está financiada por grandes varios benefactores judíos.

El proyecto consta de una sonda que será mandada sin tripulación, mide dos metros de ancho y un metro y medio de alto, pesa 600 kilos, y es la más pequeña en todo el mundo que hasta el momento alcanzara el satélite. Tiene la apariencia de una mesa de cuatros patas.

Es un ambicioso proyecto cuyo fin aún se desconoce, pero si han explicado que estudiará el campo magnético de la luna. Lo que sí han confirmado los científicos israelíes es que la nave especial pasará dos meses orbitando sobre el satélite, haciendo elipses alrededor de la Tierra para posteriormente posarse en la superficie en 13 de febrero de 2019. Aunque el viaje durara más de lo normal, a través de las eclipses se ira acercando a la superficie lunar, lo que hará que ahorre combustible y reduzca el peso de su lanzamiento.

Su lanzamiento tendrá lugar en Estados Unidos en un vehículo de lanzamiento orbital Falcon 9 de SpaceX. Una vez que se pose, los organizadores han explicado que lo que primero que hará la sonda será colocar la bandera israelí. Esta misión puede servir como experimento y prueba para preparar futuras naves espaciales que sí que viajen tripuladas al planeta.