Los mejores trucos (y más útiles) para que las uñas no se estropeen en la playa

eltiempohoy.es 14/08/2017 17:52

Lo mejor es que empieces con días de antelación. Se debe reforzar la estructura de queratina y células muertas previamente para que se hagan ultrarresistentes a la arena, la humedad del agua y el sol. Uno de los endurecedores de uñas más efectivos es el aceite de ricino. Este producto es totalmente natural y posee un alto contenido en vitamina E, muy nutritivo para las uñas.

El día antes de ir a la playa, además de hacer la maleta y hacerte un baño de caña de azúcar, te harás una manicura duradera: actualmente, existen esmaltes permanentes con tonos naturales (los más lucidos en verano) que duran dos y tres semanas, haya sol, mar o arena de por medio. Se aplica como un pintauñas tradicional y se fija con una lámpara de rayos UVA.

Aunque esta opción es la mejor si quieres que tu manicura aguante, no se debe abusar de ella, puesto que muchas manos de pintura pueden dejar la uña con un tono amarillento muy feo e insalubre. La recomendación de El Tiempo Hoy es que dejes dos semanas de por medio sin maquillarlas. De esta manera, darás un respiro a la uña y la mantendrás alejada de químicos que, tarde o temprano, acaban dañando su estructura e, incluso, generando los temidos hongos. Ya sea una permanente de salón de belleza o una manicura tradicional, aplica una base protectora antes y déjala secar antes de darle color o brillo.

Una vez en la playa, has de vigilar los tres factores amenazantes:

· La arena: se mete entre la uña y la carne separando ambas y, además, araña la parte más externa. Por eso, es recomendable atajar el problema retirando las cutículas a conciencia, para que el polvo no se meta en los pliegues, y cortar las uñas lo más cortas posible para que no entren piedrecitas.

· El agua del mar: si la estructura dura de la uña se moja, lo más probable es que el esmalte se desconche, que la queratina se reblandezca y que la uña se rompa con más facilidad. Para evitarlo, hay que estar pendiente y secar los dedos con una toalla justo después de salir del agua.

· El sol: aunque no lo parezca, la radiación también tiene que ver. El esmalte de uñas al contacto con el sol es más duradero de lo normal, y no es una ventaja. El producto químico se 'petrifica' sobre la uña, y la tarea de retirarlo es ardua. Para que no acabe lastimando la uña, es mejor que las ocultes bajo el pareo cuando te tumbes directamente en la tumbona.