Unos 3,1 millones de albaneses están llamados a las urnas entre las 7.00 horas (5.00 GMT) y las 19.00 horas (17.00 GMT) para elegir a alcaldes y concejales de 384 municipios y comunas.
Alrededor de 5.000 observadores electorales naciones y extranjeros siguen los comicios para garantizar su transparencia en la que es considerada una prueba de la madurez democrática del país para aspirar a la UE.
La policía también está en alerta para garantizar una cita con las urnas tranquila, con miles de agentes desplegados en los 4.882 colegios electorales.
La mayor batalla electoral está centrada en Tirana, donde el líder del opositor Partido Socialista (PS), Edi Rama, que dirige la capital desde hace 10 años, compite contra su rival del gobernante Partido Democrático (PD), Lulzim Basha.
La Comisión Electoral Central informó hoy que no dará los resultados definitivos hasta el 8 de junio, aunque hoy se conocerán algunas estimaciones de voto no oficiales al cierre de las urnas.
Rama considera las elecciones locales un referéndum popular sobre el gobierno del primer ministro conservador Sali Berisha, al que acusa de corrupción y fraude en los comicios generales del junio del 2009, en los que se impuso por un estrecho margen.
Desde entonces, la oposición socialista, que ha boicoteado varias sesiones parlamentarias como protesta, ha organizado numerosas manifestaciones contra el Gobierno.
El pasado enero, cuatro opositores murieron en Tirana por disparos de la policía en unos violentos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes que pedían la dimisión del primer ministro.
Berisha, tras esos incidentes, acusó a los socialistas de intentar dar un golpe de Estado, y éstos denunciaron que el mandatario había ordenado a su guardia pretoriana, la Guardia Republicana, disparar a los manifestantes.
El tenso ambiente político hace temer a la UE que se pierda el consenso necesario para realizar las importantes reformas que abran las puertas del club comunitario al país balcánico.
Desde la caída del comunismo en 1991, las elecciones en Albania han estado ensombrecidas por irregularidades y diversos incidentes violentos.