Un día después de la presentación de los Presupuestos Generales del Estado en el Congreso, Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero han protagonizado su primer cara a cara sobre las cuentas públicas. El líder del PP, tras asegurar que los PGE "deben servir para generar confianza" ha preguntado a Zapatero si "considera que el proyecto puede sacar a España de la crisis".
En su turno de respuesta, el presidente del Gobierno ha comentado que "los presupuestos son los adecuados para combatir la crisis, caminar hacia la recuperación y garantizar la cohesión y la protección social". Según ha explicado Zapatero, "todos los Gobiernos se han visto obligados a hacer impulsos fiscales extraordinarios" porque "es la obligación del Ejecutivo ante unas circunstancias cambiantes".
El líder de la oposición, por su parte, ha calificado las cuentas del Estado como "increíbles", "antisociales" y "catastróficas". En opinión de Rajoy, los presupuestos "castigan a las clases medias que son los sufridores de los despropósitos de Zapatero y los paganos de sus ensoñaciones". Según ha apuntado, "o el presidente cambia su política económica o va a poner a España en una situación imposible".
En la réplica, el presidente ha asegurado que el líder popular "no ha estado muy original" porque no ha aportado "ni una idea, ni una propuesta, ni ha expresado el compromiso de arrimar el hombro". En palabras de Zapatero, "todo ha sido un alarde de descalificación".
Renovación del Constitucional y Ley electoral
Sin embargo, las cuentas públicas no han sido el único tema de la sesión de control de este miércoles. Zapatero ha respondido además a preguntas del portavoz de ERC, Joan Ridao, y de la diputada de UPyD, Rosa Díez.
Ridao se ha interesado por el papel que piensa ejercer el Ejecutivo para impulsar en el Parlamento la renovación pendiente de los miembros del Tribunal Constitucional que han agotado su mandato. El portavoz ha subrayado que "un tercio de los magistrados deberían haber sido relevados hace más de
un año y medio", y esa circunstancia "pone en cuestión la legitimidad" a la hora de sentenciar sobre el Estatuto.
En su respuesta, el presidente ha reconocido que la situación es "manifiestamente inconveniente", pero ha recordado que la renovación exige el respaldo de 3/5 de la cámara, por lo que hace falta "voluntad política y sentido amplio de la lealtad institucional". Pese a ello, Zapatero ha prometido "redoblar esfuerzos" para renovar el Tribunal "cuanto antes".
La pregunta registrada por Rosa Díez ha versado sobre las acciones que el Gobierno piensa adoptar para lograr una ley electoral "más representativa, justa e igualitaria". Zapatero ha contestado que "cualquier reforma requiere un amplio consenso" que "impulsará" con el resto de grupos parlamentarios. EPF