En un momento en que el paro no deja de aumentar, desde la prensa nos llega una oferta de empleo. El empresario es el CDS (para los jovencísimos, se trata del partido político en el que militase Adolfo Suárez, el que fuera presidente de España en la transición). Busca políticos (si el servicio secreto británico busca espías a través del Facebook por qué no lo van a hacer ellos por medio de la prensa).
En el anuncio no se especifican requisitos, salvo el de ser político moderado aunque sin definir muy bien qué significa eso de moderado. Lo que sí dejan claro son sus objetivos: dignificar la política, eliminar la corrupción y representar al CDS en provincias para equilibrar el sistema político español.
Entramos en la página web, uno de los reclamos del anuncio, y allí nos hablan de esta resurrección. "Centro Democrático y Social (CDS ), resurge después de la mala experiencia sufrida en el Partido Popular,con el fin de regenerar la vida política española, para darle un aire fresco, con verdadero sentido de servicio público y no vanas palabras", dicen en su declaración de intenciones.
De la mano de Francisco Cabra, presidente nacional de grupo, el CDS da sus primeros pasos. Tan incipientes que, aunque se presentan a las europeas, el enlace a su candidatura en la citada página todavía ni siquiera funciona.
El nuevo CDS se define como defensor de la unidad de España aunque con respeto a las lenguas del territorio, contrarios a la nueva ley del aborto y partidarios de una modernización del país, o sea que, de momento, lo del aire fresco parece más de lo mismo. Veremos si el casting de políticos sirve para reclutar a savia nueva con alguna idea realmente original. LA