El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ha informado hoy de que se ha puesto en contacto con la presidencia checa de la UE, que hoy concluye su mandato, para concertar esta decisión y hacer regresar temporalmente a los embajadores europeos ante la gravedad de la situación.
Moratinos ha anunciado esta medida en una rueda de prensa en el Palacio de Viana junto al secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer.
"Es una llamada (de consultas) necesaria y urgente para mostrar la firmeza de la UE ante lo que consideramos una ruptura del orden constitucional. Espero que a través de los mecanismos procedentes la UE pueda tomar esta decisión lo más rápidamente posible", ha declarado.
Moratinos ha asegurado que España no va a dar -"ni creo que nadie de la comunidad internacional"- "ningún tipo de legitimidad a las autoridades provisionales inconstitucionales que tienen ahora los hondureños".
Según el ministro, "las únicas autoridades que tienen los hondureños son el presidente Zelaya, el auténtico presidente, el presidente constitucional y al que tenemos que referirnos".
"Por tanto, no va a haber ningún gesto, ningún acto, ninguna comunicación o actuación que pueda entenderse como contacto, comunicación o legitimidad a las nuevas autoridades, que son una simple farsa constitucional", ha insistido.
Tras el golpe militar del pasado domingo y la salida del país de Zelaya, el Parlamento proclamó presidente a Roberto Micheletti,
Moratinos ha comentado que España está participando, como país observador, en la reunión extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Washington para concertar posiciones con los países de esta región.