Latinoamérica reclama un nuevo mundo multipolar en el que tenga más poder

AGENCIA EFE 23/09/2009 16:28

"Un nuevo mundo es un imperativo político y moral", afirmó el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, primer orador en la tribuna de la Asamblea General de Naciones Unidas.

La defensa de una nueva era de compromiso mundial y la adaptación de las instituciones internacionales al siglo XXI fue mayoritaria en los discursos pronunciados hoy en el foro de debate de Naciones Unidas, que reúne a dirigentes de 192 países.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en su primera intervención en la ONU, hizo un llamamiento para abrir "una nueva era de cooperación" que afronte los desafíos comunes y se declaró dispuesto a actuar "de modo valiente y colectivo".

Lula lanzó un duro reproche a los países más ricos por resistirse a afrontar una reforma de los organismos internacionales que los convierta en "más democráticos y representativos" para abordar la reorganización del sistema monetario internacional.

Lula reiteró también su reivindicación histórica de ampliar el Consejo de Seguridad, el principal órgano decisorio de la ONU, y que Brasil tenga un asiento permanente allí.

Sesenta y cinco años después, dijo, el mundo no puede estar sujeto a las mismas reglas y valores que prevalecieron en la Conferencia de Bretton Woods y tras la Segunda Guerra Mundial, denunció.

En su defensa salió a continuación el líder libio, Muammar Gadafi, que afirmó, que "Latinoamérica debería de tener un sitio permanente" en ese órgano de la ONU, aunque mantuvo que el poder del Consejo de Seguridad se debe trasladar a la Asamblea General, en la que están representados todos los países.

"El mundo va a cambiar. No puede ser de otra forma. La conciencia universal exige ese cambio", dijo por su parte el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy.

El jefe de Estado francés subrayó: "Ahora sabemos todos hacia qué catástrofes puede dirigirnos nuestra obstinación por intentar solucionar los problemas del siglo XXI con los instrumentos y las ideas del siglo XX".

El diálogo multilateral debe volver al centro de la política mundial, porque "si la globalización desbocada en lo financiero ha provocado la crisis que vivimos, la acción unilateral y el desprecio por las instituciones ha significado conflictos que no queremos que se repitan", dijo la presidenta chilena, Michelle Bachelet.

Chile, agregó, apoya con fuerza la reforma y el fortalecimiento de Naciones Unidas, así como la ampliación del Consejo de Seguridad, club en el que solo están representados como miembros permanentes Francia, China, Estados Unidos, Reino Unido y Rusia.

El mandatario uruguayo, Tabaré Vázquez, expresó también su adhesión a un proceso de reforma de Naciones Unidas y al multilateralismo, que abarca también la liberalización del comercio.

"El proteccionismo es al comercio lo que el autoritarismo es a la democracia", subrayó.

La Asamblea de la ONU está siendo también escenario de numerosas gestiones diplomáticas para buscar una solución rápida y pacífica a la nueva situación creada en Honduras tras el regreso al país de su presidente constitucional, Manuel Zelaya, derrocado el 28 de junio pasado y refugiado en la embajada de Brasil desde el lunes.

España, junto a la Organización de Estados Americanos (OEA), citó hoy a los ministros de Asuntos Exteriores de los principales países implicados en la crisis hondureña, para intentar buscar una salida dialogada, pacífica y con estabilidad.

El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy, en rueda de prensa en la ONU, que la reunión tendrá lugar en la Misión de España ante Naciones Unidas, en Nueva York.

En la cita, según avanzaron a Efe fuentes diplomáticas, estarán presentes los Ministros de Exteriores de España, Costa Rica y Brasil y la canciller del Gobierno hondureño de Manuel Zelaya, además del secretario general de la OEA, José Miguel Insulza.