Lugo afronta segunda demanda mientras una tercera mujer le atribuye otro hijo

AGENCIA EFE 23/04/2009 00:00

El escándalo coincide además con nuevos roces del gobernante con el vicepresidente del país, Federico Franco, por la reestructuración ministerial que Lugo ordenó esta semana.

Esa remodelación alcanzó a órganos controlados por el partido de Franco, el Liberal Radical Auténtico (PLRA), principal aliado Ejecutivo.

"Me ha llegado la información de seis mujeres que iban a reclamar la paternidad al presidente y que entre ellas estaba yo. Actué sobre esas informaciones", dijo a periodistas Damiana Hortensia Morán, de 39 años.

Es la tercera mujer en dos semanas que dice haber tenido un hijo con el ex obispo, pero aclaró que no reclama nada a Lugo y que accedió a airear su historia "al solo efecto de que se sepa la verdad", porque considera que "tarde o temprano iba a aflorar".

Morán está divorciada desde hace cinco años, época en que asegura que conoció a Lugo tras un matrimonio que duró 17 años y durante el cual tuvo dos hijos, que ahora tienen 20 y 21 años, pero señala que los contactos íntimos se dieron en 2006, "luego de que renunciara como obispo de San Pedro (en 2004)".

En 2006, Lugo estaba al frente de la plataforma cívica Resistencia Ciudadana, de efímera existencia antes de dar vida a la hoy oficialista Alianza Patriótica para el Cambio (APC), integrada por varios partidos políticos y organizaciones sociales y de izquierda.

"Lo que puedo asegurar es que fue una gran entrega y que fue una explosión de sentimientos, y por esas cosas de Dios y de la vida, nace un fruto, que es Juan Pablo", de un año y cuatro meses, aseveró la mujer al diario Abc Color.

Además, comentó que antes de hacer público su caso habló con Lugo y que éste la derivó a su abogado personal, Marcos Fariña, el mismo que se ocupa de los otros dos procedimientos legales.

Uno de ellos tiene que ver con Benigna Leguizamón, de 27 años, que presentó hoy una demanda para exigir a Lugo el reconocimiento de un niño de seis años, el segundo de sus cuatro hijos, que asegura que concibió en San Pedro (centro), la región más pobre del país y donde el ahora jefe de Estado fue obispo poco más de una década.

La mujer, de condición humilde y con su actual pareja postrada por enfermedad, tramitó la demanda en Ciudad del Este, a 330 kilómetros de Asunción, ante la jueza Delsy Cardozo.

Leguizamón realizó esa diligencia tras rechazar ayer una propuesta del abogado de Lugo para que el jefe de Estado se realice la prueba de ADN por vías extrajudiciales.

El gobernante "no tomó en serio su caso porque pensó que por ser humilde no le iba a demandar", aseveró la mujer, quien en su denuncia afirma que Lucas Fernando sigue a la espera de la bicicleta que su presunto padre al parecer le prometió en una conversación telefónica.

Los casos de Morán y Leguizamón se suman al reconocimiento legal realizado la semana pasada por el presidente del hijo que tuvo con Viviana Carrillo, Guillermo Armindo, nacido el 4 de mayo de 2007, cinco meses después de haber renunciado a su estado clerical, el 21 de diciembre de 2006, para lanzarse a la arena política.

Parte de la prensa local y analistas políticos consideran que los cuatro cambios realizados por Lugo en su gabinete el pasado 20 de abril, en coincidencia con el primer año de su histórico triunfo electoral, se debieron a una estrategia para desviar la atención del escándalo que ha sacudido al país.

La reestructuración ministerial perjudicó al sector que lidera el vicepresidente del país en el PLRA, sosten político de Lugo en el Congreso y cuyos seguidores fueron marginados durante los ocho meses que lleva de mandato, según el segundo del Ejecutivo.

"El presidente actúa en forma aviesa en contra mía, en contra de mi grupo y contra el partido", se quejó Franco, mientras que el presidente del Congreso, el opositor Enrique González Quintana, dijo que "hay una gran discrepancia en el partido que le dio (a Lugo) el 82 por ciento (de los votos) en las elecciones".

Lugo asumió al poder el 15 de agosto pasado tras poner fin a 61 años de hegemonía política del Partido Colorado, al frente de una coalición que, si bien integran diversos grupos de sociales y de izquierda, está encabezada por el PLRA, de centroderecha.