Obama y su familia visitan el centro Pompidou en París

AGENCIA EFE 07/06/2009 09:10

Los Obama recorrieron durante dos horas este edificio diseñado por Renzo Piano y Richard Rogers e inaugurado en 1977, que estos días cuenta como exhibición estrella una muestra del pintor de origen ruso Vassilii Kandinsky.

La explanada frente al edificio, normalmente llena de artistas callejeros, se encontraba vacía debido a las medidas de seguridad para permitir la visita del presidente, su esposa, Michelle, y sus dos hijas: Malia, de diez años, y Sasha, que hoy cumple ocho.

En un momento dado, la comitiva presidencial se asomó a las ventanas para saludar al público que abarrotaba las calles adyacentes para intentar ver a la familia presidencial estadounidense.

Tras la visita, regresaron a la residencia del embajador estadounidense, donde han pernoctado desde el viernes, en una comitiva presidencial que recorrió las calles parisinas a gran velocidad.

A lo largo del recorrido, las calles se encontraban llenas de público que saludaba al convoy, en una escena comparable a las llegadas a la meta en el Tour de Francia.

De la residencia del embajador, Obama emprendió camino al aeropuerto para regresar a Washington, a donde partió sin su familia a las 12.30 horas locales (10.30 GMT).

La primera dama y las niñas permanecerán aún unos días en la capital francesa, donde continuarán sus visitas turísticas e irán de compras y serán recibidas por la esposa del presidente francés Nicolas Sarkozy, Carla Bruni.

Se trata de la primera visita a Europa de las pequeñas Obama, que hasta ahora sólo habían acompañado a sus padres en una visita a Kenia, y la familia presidencial ha querido aprovechar la ocasión para disfrutar la capital francesa como unos turistas más, en la medida de lo posible.

Obama había llegado el viernes a París en la última etapa de una gira por Oriente Medio y Europa, para participar en los actos de conmemoración del 65 aniversario del Desembarco de Normandía en el Cementerio Americano de Colleville.

El mismo viernes se le reunieron Michelle y las niñas, que aprovecharon esa noche para visitar el símbolo de la ciudad, la Torre Eiffel.

Tras regresar de Normandía, Obama y su familia dedicaron la velada del sábado a visitar la catedral de Notre Dame, cerrada al público para la ocasión y rodeada de unas fuertes medidas de seguridad, por espacio de una hora, acompañados del rector de Notre Dame, monseñor Patrick Jacquin.

A continuación el mandatario y su familia, en la larga comitiva presidencial y aclamados en numerosas ocasiones por el público a lo largo de su recorrido, se desplazaron a un restaurante de gran tradición en París en las cercanías de la Torre Eiffel.