El PP arropa a Rajoy ante la investigación y pedirá la recusación de Garzón

EFE 11/02/2009 12:12

También merece, tal y como ha anunciado Rajoy en una comparecencia ante los medios, que los populares rompan cualquier interlocución con el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo.

La dirección nacional del PP, tras las primeras informaciones de las pesquisas de Garzón, que ya cuenta con 37 imputados, decidió el pasado lunes convocar para hoy una sesión urgente del Comité Ejecutivo, el órgano del partido destinado a su administración en las diferentes áreas territoriales.

Se atisbaba tensión para el cónclave, habida cuenta de la preocupación de muchos dirigentes por la investigación de Garzón, pero la publicación hoy de una información acerca de una jornada de cacería que compartieron Bermejo y Garzón el pasado fin de semana ha servido para reforzar la unidad, según han remarcado fuentes populares.

Únicamente la segunda teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, se ha desviado del mensaje común cuando ha reclamado ante Rajoy una defensa "más firme" del "legado" del ex presidente del Gobierno, José María Aznar, si bien su intervención ante el Comité Ejecutivo se ha orientado sobre todo a respaldar las decisiones que el actual líder del partido ha adoptado estos días.

Rajoy, de hecho, como han apuntado fuentes populares, ha pedido que si alguien entiende que no se produce una defensa férrea de algunos dirigentes o ex dirigentes, se le comunique en el acto.

Todas las demás intervenciones en esta reunión del Comité han girado en torno a la unidad del partido y al "uso partidista" de la Fiscalía General del Estado.

La presidenta del PP en Baleares, Rosa Estarás; la de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; el responsable de Comunicación del partido, Esteban González Pons; y el diputado José María Michavila, entre otros, han relatado algunos casos para ilustrar la "indefensión" de los populares ante los protocolos de actuación de la Fiscalía.

También tomó la palabra el presidente valenciano, Francisco Camps, para agradecer el apoyo de su partido, tranquilizar a los suyos y asegurar que las cuentas del PP en dicha comunidad cumplen la legalidad.

Casi quince dirigentes han pedido la palabra y todos, como han destacado a Efe fuentes presenciales, han recalcado la importancia de estar ahora unidos y cohesionados.

Así que, a instancias de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, todo el Comité Ejecutivo compareció con Rajoy ante los medios de comunicación.

En una declaración leída, tras la que no ha habido preguntas, el líder del PP ha anunciado, además de la ruptura de relaciones con Bermejo y la solicitud de recusación de Garzón, que su partido remitirá al Consejo General del Poder Judicial un escrito para solicitar que examine el asunto.

Igualmente pedirá que manifiesta "si es razonable y sensato" que el juez instructor del caso se vaya de cacería con el ministro de Justicia.

Para Rajoy, se trata de "un acto obsceno" y de un hecho "inaceptable", pues coincide con la investigación en curso, y aparte de "hacer daño" a las instituciones y a la independencia del poder judicial, "liquida la calidad de la democracia".

Ante semejante "alarma social", el grupo parlamentario popular pedirá explicaciones al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y exigirá la comparecencia urgente en la Cámara del fiscal general, Cándido Conde-Pumpido.

Porque desde las instituciones, especialmente desde la Fiscalía, el PP percibe un trato diferente.

"Nunca en España, ni con Adolfo Suárez, ni con Leopoldo Calvo-Sotelo, ni con Felipe González, ni con José María Aznar se había hecho un uso tan partidista de la Fiscalía como hasta ahora", ha asegurado Rajoy, para quien el caso, más que una "trama del PP", resulta "una trama contra el PP".

Por tanto, el Partido Popular ve necesario que se levante completamente el secreto de sumario.

El presidente del PP ha reafirmado "la unidad y cohesión" de los populares porque el objetivo es compartido: defender "con contundencia la honorabilidad" del partido.