Prisión incondicional para Iratxe Yáñez y Garikoitz García

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 11/01/2010 13:01

Esta decisión se produce después de que el fiscal que sigue el caso solicitara esta medida cautelar por los delitos de desobediencia, falsificación, robo de vehículo y colaboración con banda terrorista. Los dos etarras están pendientes de ser trasladados a España en virtud de una Orden de Detención Europea (OED), después de que el ministro de Justicia de Portugal, Alberto Martins, admitiera que se barajaba esta fórmula en lugar de la extradición.

Iratxe Yáñez y Garikoitz García Arrieta llegaron pasadas las 14.00 horas de este lunes al Juzgado Central de Instrucción Criminal en Lisboa, donde fueron interrogados durante unas cuatro horas. Según informaron fuentes jurídicas a los medios portugueses, el abogado de los dos presuntos terroristas, José Galamba, avanzó que su estrategia de defensa es "evitar la extradición a España".

El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska solicitó este lunes a las autoridades judiciales de Portugal la entrega de los dos presuntos etarras detenidos el pasado sábado en el país luso por transportar una furgoneta cargada de explosivos, que podría producirse en el plazo de un mes.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 3, que se encontraba de guardia la semana pasada, cursó ayer dos órdenes europeas de detención (OED) para que Garikoitz García Arrieta e Iratxe Yáñez Ortíz de Barrón puedan ser juzgados en la Audiencia Nacional por todas las causas que tienen pendientes en España.

Armas y explosivos en la furgoneta

Según las citadas fuentes, en la furgoneta se encontró documentación que vincula con el vehículo a Zendotitabengoa -huído desde 2003 tras ser condenado a tres años de prisión por un delito de violencia callejera-, que es a quien la Guardia Civil trata de localizar en Elorrio, donde los agentes del instituto armado están registrando dos viviendas. Por otro lado, agentes de la Guardia Civil están registrando en Vitoria el domicilio de los padres de la presunta miembro de ETA Iratxe Yáñez.

El pasado sábado una furgoneta con explosivos fue interceptada en un control rutinario en Bermillo de Sayago y su conductor, el presunto etarra, Garikoitz García Arrieta, huyó en el coche de la patrulla de la Guardia Civil hasta que fue detenido en Portugal, donde también fue apresada Iratxe Yáñez Ortiz de Barron, que viajaba el vehículo lánzadera.

El objetivo de Yáñez y Garikoitz era extender la infraestructura de la banda a Portugal, una vieja idea de los etarras.

La furgoneta portaba un cañón de 30 centímetros de diámetro fabricado a partir de una bombona y un extenso arsenal de armas, explosivos y otros materiales de carácter logístico.

Este peculiar arma de fabricación propia consiste en una bombona seccionada en su parte superior conformando un cañón de 30 centímetros de diámetro, según el Ministerio del Interior. Los etarras portaban también un fusil con mira telescópica, un revolver, una pistola,650 cartuchos de diversos calibres, 10 kilogramos de pentrita, diez ampollas de nitrato de plata, utilizado habitualmente por la banda para la fabricación de bombas lapa.

También se han encontrado dos bidones de plástico de 10 litros de capacidad cada uno, que contenían líquido que se está analizando junto a 25 temporizadores.

Asimismo, entre el material con el que contaba ETA para futuras acciones terroristas se encontraba también gran cantidad de material electrónico: 200 circuitos de temporización, 400 leds de colores rojo y verde, 100 pilas y 200 conectores de pilas de 9 voltios, un convertidor de corriente, 50 relojes electrónicos, 30 sensores antimovimiento, conectores, condensadores, tiristores, transistores, potenciómetros, interruptores deslizantes, condensadores cerámicos, diodos, circuitos, etc.

También se han hallado objetos para desarrollar trabajos de falsificación. Había más de 200 placas de matrícula francesas y españolas sin troquelar, dos troqueladoras, material para troquelar placas de matrícula, diversas herramientas (dos taladros y una remachadora) y cinco dispositivos para la apertura de vehículos), con el anagrama de ETA.

El arsenal incluye dos bombonas de gas a presión (propano y butano), vacías de 84 litros de capacidad, dinero (unos 800 euros), diversa documentación y varios bidones de los utilizados habitualmente por la banda para la fabricación de sus 'zulos'

Registros sin éxito

La Guardia Civil ha registrado un local en Lizartza (Guipúzcoa) vinculado a Pedro María Olano, detenido la semana pasada en esta localidad por su presunta relación con ETA, sin que los agentes hayan encontrado explosivos ni documentos en la intervención, han informado a Efe fuentes antiterroristas.

Las mismas fuentes han explicado que Olano ha sido conducido esta tarde a Lizartza para inspeccionar este local en su presencia, aunque en el registro, que ha durado apenas diez minutos, no se han realizado hallazgos significativos. Olano, que presuntamente actuaba de enlace entre el aparato de logística de ETA y sus "comandos" operativos, se encargaba supuestamente de transportar material para la comisión de atentados entre España y Francia.

El ahora detenido fue condenado a dos años de cárcel por amenazar de muerte a la alcaldesa de la localidad, Regina Otaola, durante la izada de banderas española, vasca y local en el consistorio, en septiembre de 2007, durante las fiestas de la localidad.

El arresto de Olano, de 49 años, fue posible después del estudio y análisis de la documentación intervenida a la dirigente de SEGI Irati Mugica Larreta, arrestada el pasado 24 de noviembre junto a otra treintena de militantes de la organización juvenil abertzale.

Más de 20 zulos

Todo este material, junto al dinero y una detallada contabilidad halladas el pasado sábado en un escondite de la banda en una zona boscosa del término municipal de Chadrat, próximo a Clermont-Ferrand, se une a los efectos incautados en las operaciones que la Policía Nacional y la Guardia Civil, junto a las fuerzas de seguridad francesas, desarrollaron a lo largo de 2009.

Esos operativos permitieron el desmantelamiento de buena parte de la estructura logística de la banda con la localización de más de una veintena de depósitos y la incautación de numerosos materiales, entre ellos más de 1,3 toneladas de explosivos y varias decenas de armas.

A lo largo del año, se incautaron 1.300 kilogramos de nitrato amónico, 60 kilogramos de cloratita, más de 50 kilogramos de polvo de aluminio, casi 40 kilogramos de pentrita, 15 kilogramos de dinamita, una decena de bombas-lapa, más de 400 detonadores, más de un centenar de temporizadores, más de 1.000 metros de cordón detonante, numeroso material electrónico con el que se podrían haber fabricado decenas de artefactos de todo tipo, 50 armas cortas (pistolas y revólveres), dos subfusiles, más de 13.000 cartuchos y abundante documentación con instrucciones sobre armas y explosivos.