La consellera de Enseñanza de la Generalitat, Irene Rigau, ha acusado este martes al Gobierno central de frenar a Cataluña en materia de educación y ha reclamado "mucha más libertad" para conseguir mejorar el sistema, tanto a la hora de decidir el destino de los recursos como para diseñar las estructuras y los mecanismos del modelo.
Así se ha pronunciado en la primera de las conferencias que CDC ha organizado por el 9N bajo el título 'El país que queremos construir', que se ha celebrado en la fundación CatDem, en la que también ha participado el conseller de Cultura, Ferran Mascarell, y el presidente de CiU en el Parlament, Jordi Turull.
"El Estado actual y el Ministerio de Educación del Gobierno de Mariano Rajoy nos frena para poder crecer en educación y hacer lo que nos toca hacer", ha sostenido Rigau, que ha precisado que si tuviera más instrumentos para actuar desde la Conselleria podrían adecuar titulaciones universitarias, las de FP, y combatir el abandono y el fracaso escolar, entre otras cuestiones.
En la misma línea se ha pronunciado Mascarell, que ha explicado que su deseo es hacer una Cataluña "más culta" donde la fuerza y la convicción de la sociedad civil continúe estando al frente de la vida cultural.
Sin embargo, ha asegurado que su deseo choca con la ineficiencia con la que, a su juicio, actúa el Estado en materia cultural, lo que provoca que no se avance al ritmo que se podría hacer: "Históricamente hemos tenido un Estado impropio que nos ha puesto dificultades. No haberlo tenido hubiera sido favorable. Nos ha condicionado la vida".
Mascarell ha explicado que para tener una Cataluña más culta habría que disponer de un parlamento soberano, porque podría decidir qué parte de la prosperidad nacional se destinaría a cultura y diseñar un marco legislativo eficaz, y ha asegurado que en un Estado catalán el IVA cultural "no sería el más alto de Europa" y que la primera de las leyes que presentaría sería la del mecenazgo.
"ORDEN DE ALEJAMIENTO"
Al inicio de la conferencia, Turull ha preguntado si el Gobierno central decretará "una orden de alejamiento de los institutos" para impedir que los catalanes puedan votar el 9N, pero les ha advertido de que es un proceso imparable.
"El Estado lo está intentando todo. No sé si lo que quieren prohibir es la democracia, el voluntarismo o la libertad de expresión"; ha cuestionado Turull, tras avisar de que en el diccionario del catalanismo político no existe la palabra resignación.