Simancas dice que a Gómez y Lissavetzky "les toca señalar el camino y repartir tareas" porque el "2015 está ahí mismo"

EUROPA PRESS 16/09/2013 11:38

El diputado nacional y exsecretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM) Rafael Simancas ha afirmado que al líder del PSM, Tomás Gómez, y el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, "les toca señalar el camino y repartir tareas" porque el "2015 está ahí mismo".

En un artículo en la 'Fundación Sistema' recogido por Europa Pres', Simancas hace una descripción de la situación actual de la Comunidad de Madrid, que tilda de "desoladora", y destaca que en este escenario "la sociedad madrileña sólo dispone de un instrumento con capacidad para superar este declive, para definir un proyecto que asegure progreso justo en la comunidad y para aglutinar el esfuerzo de una mayoría en su consecución", "que es el PSM", que "ya está trabajando para merecer el encargo y para llevarlo a efecto".

En este punto, destaca que en el PSM todos deben "ser conscientes de la responsabilidad" que les corresponde y cada cual desde su puesto, debe "sobreponer el cumplimiento de tal responsabilidad sobre cualquier otro propósito o sentimiento".

Así, señala que "Tomás Gómez y su equipo dirigen el partido y son la referencia en la Comunidad de Madrid", "Jaime Lissavetzky y sus concejales pilotan el grupo municipal en la capital" y "cada municipio cuenta con su alineación democráticamente elegida". "A ellos corresponde señalar el camino y repartir tareas", remarca.

"La sociedad madrileña necesita un programa de cambio para el progreso", destaca y dice que debe ser un "proyecto que genere complicidades y alianzas movilizadoras como nunca antes". "Y necesita equipos honestos, eficaces y plurales para conquistar su propio futuro", recalca y añade que "no es esta una tarea para una sola organización", sino que se "necesitarán muchas manos unidas con fuerza para cumplir los objetivos de interés común". "Y corresponde al Partido Socialista de Madrid dar un paso al frente. Ésta es su hora. El 2015 está ahí mismo", remarca.

"DECLIVE" EN LA COMUNIDAD DE MADRID

En su artículo, Simancas destaca que en las última jornadas "se han acumulado varias noticias que muestran con claridad el declive económico, social e institucional que sufre la Comunidad madrileña" como el "fiasco olímpico", la judicialización de la externalización sanitaria "y el final del liderazgo aeroportuario de Barajas en favor de El Prat". Todo ello, "escasos días después de la celebración del Debate sobre el Estado de la Región más bronco y estéril que se recuerde".

A su juicio, resulta "evidente que Madrid necesita un golpe de timón para que su economía adquiera liderazgo y posibilidades de crear empleo, para que su sociedad recupere equidad y calidad de vida y para que sus instituciones sirvan definitivamente a los madrileños antes que a la perpetuación del partido en el poder".

Además, sostiene que "resulta diáfano que el PP ya no está en condiciones de afrontar este cambio necesario", por lo que "ésta es la hora en la que el Partido Socialista está llamado a asumir sus responsabilidades en Madrid".

Simancas considera que "no cabe atribuir la responsabilidad del fracaso olímpico a los gobiernos del PP en exclusiva", pero añade que "los déficit de Madrid en cuanto a solvencia económica y pujanza internacional han influido indudablemente en la decisión del Comité Olímpico Internacional (COI)".

En su opinión, "las apuestas de la derecha para el modelo productivo regional han ido combinando el 'laissez faire' de la presidenta ultraliberal y el faraonismo errático de su predecesor". Asimismo, critica que "Madrid renunció a la planificación territorial, al fomento de la industria, a la significación por el I+D+i, al protagonismo de sus universidades, al estímulo de sus creadores culturales y al liderazgo de su idioma universal".

EL PP JUGÓ A "LA RULETA DE LA ESPECULACIÓN"

"El PP jugó el futuro de Madrid en la ruleta de la especulación inmobiliaria, las grandes obras públicas a cargo de endeudamiento y algunas ocurrencias a modo de voluntarismo pseudo-demágógico", recalca.

En el caso de los servicios, considera que es un "campo aún más desolador", ya que "la enseñanza pública pierde recursos, calidad y equidad a manos de una política que tiene como lema principal 'que cada cual llegue tan lejos como le pueda llevar el dinero de su familia'".

En el caso de la sanidad, critica los "recortes" y las "externalizaciones", que considera que "son lo mismo" y que están convirtiendo los otrora ejemplares servicios sociales madrileños para mayores y discapacitados, por ejemplo, "en un cruel ejercicio cotidiano de 'sálvese quien pueda'".