Zapatero ha participado en el acto central de la campaña electoral del PSC para los comicios catalanes del próximo domingo, donde ha arropado al candidato socialista, José Montilla, junto al ex presidente del Gobierno Felipe González, y la ministra de Defensa, Carme Chacón.
Una decena de simpatizantes de la causa saharaui ha interrumpido brevemente el inicio del mitin, cuando Zapatero estaba explicando que su Gobierno es uno de los que más dinero destinan a Haití, momento que ha aprovechado para recordar que es el que más colabora económicamente con el Sahara Occidental.
En un repleto Palau de Sant Jordi y ante unas 20.000 personas, según la organización, Zapatero ha reclamado el voto para que los socialistas puedan seguir gobernando la Cataluña "de la convivencia, de la integración, firme y fuerte, que sume con España".
Frente a ello, ha recordado que CiU ha dicho que si llega al poder lo primero que hará será reducir un 20 por ciento la administración, después de lo cual vendrá, a su juicio, la reducción del número de empleados públicos y de los servicios públicos.
"Eso es lo que se juega Cataluña: mantener los avances en sanidad, en educación y en servicios sociales o abrir la puerta a desmantelar el Estado del bienestar y los avances sociales y los servicios públicos que Cataluña ha conquistado con Montilla al frente en estos años", ha alertado.
Precisamente su discurso ha girado en torno a los logros económicos, sociales, de infraestructuras o de autogobierno que se han conseguido en estos años de gobierno del PSC, que ha alcanzado la mayor financiación de su historia para Cataluña.
Así, ha hecho un llamamiento a la movilización el próximo domingo para que los catalanes voten al PSC, al considerar que es la opción que defiende la "Cataluña de la convivencia, de la integración, por una Cataluña fuerte en España, que sume con España, del Estado del bienestar, una Cataluña que no busque referentes en Irlanda ni en ningún sitio".
Por "una respuesta progresista a la crisis" -ha resumido- que permita desde la confianza cambiar el modelo económico y preservar el Estado del bienestar y las políticas sociales, al tiempo que se genera confianza.
Una tarea, desde su óptica, "que es de todos, no sólo del Gobierno, sino también de la oposición, de los responsables públicos, de aquellos que tienen una voz y si quieren a España que defiendan la confianza de España".
Ha tenido también palabras de elogio para José Montilla, de quien ha destacado además su capacidad para gobernar "a tres a la vez", en alusión al tripartito.
Montilla, ha apreciado Zapatero, "no tiene un concepto tan alto de sí mismo como otros candidatos, que se adornan, que se creen lo mejor", pero tiene "el estilo de un buen socialista", que "trabajando con la seriedad y con los hechos ha conseguido el modelo de financiación autonómica mejor de la historia y que nunca se mejorará, no lo hará CiU y menos el PP".
De hecho, ha dicho que todavía está esperando que Artur Mas o Josep Antoni Duran Lleida "discutan que éste ha sido el periodo de más autogobierno de Cataluña, de la mejor financiación, de las mayores inversiones del Estado".
"Esta también ha sido la etapa de mayor respeto a la identidad de Cataluña, al sentimiento de Cataluña y al catalán, por el que he luchado, trabajado y que me ha costado algún disgusto", ha numerado Zapatero, para poner en valor que su partido ha defendido que se pudiera hablar en las instituciones europeas en catalán mientras algunos denigraban este idioma.
Al PP catalán, el jefe del Ejecutivo le ha dicho que "quedará una mancha muy negra en su historial por ese vídeo", en referencia al videojuego en el que su candidata "cazaba" a inmigrantes ilegales.
Por contra, ha prometido que los socialistas van a "combatir fuertemente a aquellos que intenten denigrar a los inmigrantes" y va a ser "un muro de defensa de las personas, hayan nacido donde hayan nacido y tengan el color que tengan".
"Yo no te puedo votar -le ha dicho a Montilla-, porque no voto en Cataluña; pero si te pudiera votar lo haría convencido, tranquilo, alegre y, Carme (Chacón), nada más", ha bromeado, en alusión al vídeo de los jóvenes del PSC en el que una mujer tiene un orgasmo al depositar la papeleta socialista en la urna.
Tampoco ha olvidado el tono distendido para hacer un juego de palabras entre las elecciones catalanas del domingo y el partido entre el Barcelona y el Real Madrid del lunes. "El domingo hay un partido y yo quiero ganarle, Montilla. El lunes hay otro partido y ya sabéis quién quiero que sea el mejor", ha apuntado.