El alcalde de Lugo, el socialista Xosé López Orozco, ha reconocido este lunes que se podría admitir "alguna excepción" a la máxima del líder del PSdeG, Manuel 'Pachi' Vázquez, de 'un militante, un cargo', pero ha afirmado que respalda la norma de incompatibilidades defendida por el secretario xeral del partido.
Con estas palabras ha querido rechazar que él haya participado en "ningún cenáculo de conspiración" contra su jefe de filas, si bien ha reconocido que cenó, durante la celebración de la Conferencia Política del PSOE, con el regidor de Vigo, Abel Caballero, quien ha desafiado en días pasados al líder socialista asegurando que si Carmela Silva sale elegida en el Congreso no dejará su puesto como concejala en el Ayuntamiento olívico.
"Estuvimos hablando de nuestras alcaldías, de nuestros proyectos, de los problemas que tenemos, de los problemas de financiación, de qué va a suceder con los presupuestos de este año. Eso sí que le puedo decir que es verdad, después, nada más", ha relatado Orozco en su intervención, en la que se ha desvinculado de las tesis de Caballero sobre la candidatura de Silva.
"El alcalde de Lugo y el de Ourense lo que apoyan son las resoluciones que tomó el Partido Socialista en el congreso de Pontevedra y, en mi caso, por la vía de los hechos", ha asegurado, basándose en que Concepción Burgo (exconcejala de Cultura y hoy parlamentaria autonómica) dejó de formar parte de la anterior corporación "atendiendo a la máxima de una persona, un cargo".
Pese a todo, Orozco ha dejado la puerta abierta a que pueda haber "alguna excepción", aunque insiste en que es "bueno" que cada persona "tenga un cargo y lo desempeñe lo mejor que sepa y pueda". "Desempeñar dos para mí sería muy complicado y, por eso, en el congreso de Pontevedra fui de los que apoyé esa resolución", ha mantenido, para defender que "hay que acatar" las normas.
PARTIDO "QUE DEBATE"
Así las cosas, Orozco ha justificado la polémica interna en que el PSOE "es un partido abierto, que debate". "En Vigo está el caso de esta compañera, que parece que va a ir en las listas, pero todavía no se produjo la elección", ha reflexionado, para dejar claro, en todo caso, que "este problema sería un problema a posteriori". "Una vez que concluya la elección, sería el momento de optar por A o por B", ha zanjado.
Finalmente, Orozco ha insistido en que no discute "la figura del secretario xeral". "En absoluto. Desde luego, no seré yo quien la discuta y no vi a nadie que la discutiera", ha concluido.