En una rueda de prensa en el Palau de la Generalitat, ha remarcado que ha tomado esta decisión muy convencido porque los beneficios superan a los costes, y además "no quiere cargos", por lo que desde el domingo por la noche pasará a ser expresidente de la Generalitat.
Ha dicho que la solución se ha precipitado en las últimas horas y no estaba prevista, y ha recordado que su prioridad es trabajar por el país.