El fiscal Pedro Rubira ha solicitado a la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional que condene a nueve años de cárcel a Ibai Peña Balanzategui como autor de la quema de un cajero que fue atacado el 13 de agosto de 2006 en Vitoria.
Durante el juicio, que ha quedado visto para sentencia, el acusado ha alegado que no participó en el ataque, realizado con cócteles molotov, y que en el bar en el que trabajaba le robaron la camiseta cortada a modo de pasamontañas que fue hallada a 180 metros del lugar impregnada con sus restos biológicos.
El representante del Ministerio Público ha señalado como principales pruebas contra el acusado el hallazgo de esta prenda, que fue arrojada detrás de la tapia de un colegio próximo al cajero, y el testimomio de un testigo protegido, que presenció estos hechos. "Pensé que vendrían de atracar a alguien pero luego vi que el cajero que estaba en llamas", ha apuntado.
"SE VEÍA LO QUE PODÍA SALIR"
También ha alegado que Peña no era "ajeno al mundo radical", ya que, según ha declarado un mando de la Ertzaintza, su familia había sido investigaba porque se significaba en el entorno de la izquierda abertzale y "apoyaba mucho al hijo con gritos de 'Jo ta ke' (Dale duro)". "La familia le apoyaba mucho en ese contexto y ya se veía lo que podía salir", ha dicho.
La defensa, por su parte, ha pedido la libre absolución de su cliente argumentando que la camiseta de su cliente había sido robada. "La camiseta es un objeto móvil, un objeto cuya movilidad no se niega", ha defendido su abogado.
Por estos hechos, que se produjeron a las 00.17 horas, Igor Mayora Zumeaga fue condenado en marzo del pasado año a tres años de cárcel.