Estos son algunos de los datos del estudio sociológico del Euskobarómetro, correspondiente a la oleada de mayo de 2010, hecho público hoy y que también releva que el 63% de los vascos sigue en desacuerdo con el pacto de estabilidad entre el PSE y el PP, -dos puntos menos que la anterior oleada de noviembre de 2009-, frente a un 19% que ahora está de acuerdo (un punto más).
Entre los datos positivos está en el hecho de que "se dispara" el clima de optimismo mayoritario (60%) con la evolución del problema de la violencia, con un incremento semestral de 11 puntos, y que mejoran, según ha explicado el director de la encuesta que realiza la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), Francisco Llera, el sentimiento de libertad para hablar de política o para participar en ella, "rompiendo una tendencia de dos años de empeoramiento".
Asimismo, "ya son más -un 29%- los que consideran más eficaz" la política antiterrorista del actual gobierno socialista en relación con el gobierno de Juan José Ibarretxe, un 21%, "gracias al incremento de 9 puntos de valoración positiva en el último semestre" y se rebaja el clima mayoritario de crispación social.
El empleo se mantiene como la principal preocupación (52%) seguido por la situación económica (un 20%), mientras que la violencia terrorista se sitúa con un 2% en un "mínimo histórico" de preocupación, lo que ha sido muy destacado por Llera.
"La preocupación por la violencia prácticamente ha desaparecido y ha caído en la misma proporción (seis puntos) en la que ha subido la preocupación por la situación del bienestar", ha resumido Llera.
Respecto a la labor del Gobierno vasco, sólo un 22% confía en la capacidad del Ejecutivo de Patxi López para resolver los problemas del país en el actual contexto de crisis, y los vascos vuelven a suspender a su clase política, ya que únicamente la portavoz de Aralar, Aintzane Ezenarro, consigue un aprobado.
Sobre el terrorismo y su final, y aunque se "dispara claramente" el optimismo respecto a la evolución de la violencia, el 71% no cree en la predisposición de ETA y su entorno social de poner fin a la violencia, a pesar de que el rechazo a la banda terrorista es "frontal y mayoritario" (un 62%), incluso entre el electorado de la izquierda abertzale ilegalizada, donde el 52% apoya sus fines pero rechaza sus métodos violentos.
Además, un tercio de los votantes de la izquierda abertzale piensa que el mantenimiento de ETA está perjudicando los intereses políticos de esta corriente.
Los vascos se muestran mayoritariamente (69%) a favor de la constitución de un "polo soberanista", si bien condicionándolo a que se condene el terrorismo.
El estudio se ha realizado en base a 1.200 entrevistas individualizadas llevadas a cabo en toda la CAV entre el 6 y 28 de mayo de 2010 con un error muestral del 2,82%.