En declaraciones a Europa Press, Cima ha explicado que ha acudido al encuentro para defender los intereses de las pequeñas y medianas empresas, ha insistido en que su presencia no tenía ninguna finalidad política y ha pedido que el proceso se haga "con diálogo y siempre desde la legalidad".
Ha explicado que en la reunión, que ha valorado positivamente, han intervenido todos los participantes, y ha detallado que la suya se ha basado en el interés de las empresas pequeñas y medianas: "Mi papel es velar para que no se lesionen los intereses de las pymes".
Según Cima, Fepime --que forma parte de la órbita de Fomento del Trabajo, que no ha asistido a la reunión--, ha asistido al encuentro celebrado en el Parlament para escuchar y ver cómo se quiere impulsar el proceso por el derecho a decidir, y ha puntualizado que muchos de los presentes no estaban de acuerdo con celebrar una consulta.
De hecho, ha insistido: "Lo primero que ha quedado claro es que estar allí no supone estar a favor de la independencia. Hay posturas a favor y en contra".
Preguntado sobre la postura de la Fepime respecto al derecho a decidir, ha asegurado que "es difícil o prácticamente imposible" definirse como organización por una u otra opción porque los miembros de la patronal tienen posturas diversas, y ha destacado que cuando se reúna la junta directiva escucharán las opiniones de todos los representados.