CiU y PNV no votarán contra del pacto europeo de PP y PSOE pero su apoyo dependerá de que se añadan sus propuestas

EUROPA PRESS 24/06/2013 18:10

Los nacionalistas de CiU y PNV no tienen previsto votar en contra del pacto europeo sellado por el PP y el PSOE ante el decisivo Consejo Europeo de los próximos días 27 y 28, pero su apoyo al texto, que será debatido este martes en el Pleno del Congreso, dependerá de que los dos partidos mayoritarios acepten incluir algunas de enmiendas, singularmente la que aboga por emitir eurobonos en un plazo máximo de dos años para abaratar el coste de la deuda de los 27.

Desde ambas formaciones justifican su posición apuntando que el contenido del acuerdo de 'populares' y socialistas es "correcto" y que, por tanto, no cabría votar en contra. Ahora bien, sí lo consideran "escaso" y de ahí que presentaran una batería de enmiendas conjuntas que tratarán de que sean finalmente añadidas al texto pactado.

En caso de que PP y PSOE aceptaran introducir sus ideas, CiU y PNV ya avanzan que respaldarán el pacto, según comentaron a Europa Press fuentes de ambos partidos, mientras que se decantarán por la abstención, si los dos partidos mayoritarios se cerraran completamente en banda.

No obstante, tanto 'populares' como socialistas están muy interesados en cerrar un texto que cuente con el máximo de los apoyos posibles, por lo que tratarán de aprovechar hasta casi el momento de la votación para conseguir ese consenso con los nacionalistas, pero también con Unión, Progreso y Democracia (UPyD), que también registró sus propias 'recetas' ante Europa.

CC Y UPN PULSARÁ EL BOTÓN VERDE

Y es que hasta el momento el acuerdo europeo pactado por el presidente Mariano Rajoy y el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba sólo cuenta con el sí de la diputada de Coalición Canaria (CC), Ana Oramas, y del parlamentario de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Carlos Salvador.

Oramas ya avanzó que respaldaría esa iniciativa porque comparte los ejes principales del acuerdo y la importancia que éste entraña para Canarias, que necesita, "más que ninguna otro" territorio, que se "desbloqueen" aquellas políticas que incentiven la creación de empleo y el impulso de la actividad económica.

Su socio parlamentario y diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, se inclina más por la abstención, en su caso por las formas empleadas por PP y PSOE en la consecución del acuerdo --algo compartido por la mayoría de los grupos minoritarios de la oposición--, y por la insuficiencia de los contenidos del pacto. Parecidos argumentos esgrime el representante de Foro Asturias, Enrique Álvarez Sostres.

Quien también pulsará este martes el botón verde es el representante de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Carlos Salvador, cuyo partido ha venido pidiendo desde el inicio de la presente legislatura grandes pactos nacionales, como éste, para hacer frente a la actual coyuntura económica por la que atraviesa España.

LOS GRUPOS DE IZQUIERDA DIRÁN NO

Lo que es más que seguro es que al acuerdo no se sumará el grupo parlamentario de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), que no sólo ha criticado las formas y el contenido del texto pactado por PP y PSOE, sino que además defenderá también este mismo martes su propia proposición no de ley ante la cumbre europea de los próximos jueves y viernes frente a la propuesta de "mínimos" de 'populares' y socialistas.

Entre otras muchas cuestiones, IU, ICV y CHA abogan en primer lugar por derogar el artículo 135 de la Constitución para eliminar la prioridad absoluta del pago de los compromisos derivados de la deuda, y romper de manera definitiva con la 'troika'.

La misma posición que la coalición que capitanea Cayo Lara adoptarán otras formaciones de izquierdas del Grupo Mixto como Esquerra Republicana (ERC), el Bloque Nacionalista Galego (BNG), Compromís-Equo y Amaiur.

Los nacionalistas gallegos han registrado una enmienda con un texto alternativo al pacto europeo del PP y PSOE porque, según ha denunciado la diputada Olaia Fernándes Davila, los mayoritarios asumen, "comparten y defienden el diseño neoliberal de la UE y asumen el esquema anti social" de sus políticas, y que, a su juicio, no es más que una "maniobra de distracción" para "salvar la cara al bipartidismo".