Joseba Andoni Ullibarri, el condenado por amenazar de muerte a través de Internet a la eurodiputada del Partido Popular Teresa Jiménez Becerril, ha solicitado al Tribunal Supremo ser absuelto porque no se despejó la duda sobre si fue él o su novia el autor de los mensajes.
La Sala de lo Penal del Supremo ha acogido este miércoles la vista en la que la Fiscalía y la defensa de la europarlamentaria han pedido que se desestime el recurso del acusado y se confirme la sentencia de la Audiencia Nacional por la que se le condenó a un año y medio de prisión por un delito de humillación a las víctimas.
La Audiencia Nacional declaró probado que el acusado redactó en la página web de la dirigente 'popular' un post cuyo contenido era: "A ver si con un poco de suerte te pegan un tiro antes de la tregua definitiva y así te reúnes con los tuyos, so zorra... Un besito".
Inquietó así gravemente a la política por ser la hermana de Alberto Jiménez-Becerril, concejal del PP en Sevilla que fue asesinado junto a su esposa por la banda terrorista ETA el 30 de enero de 1998.
La Fiscalía y la acusación particular han considerado ante el Supremo que existen pruebas suficientes para considerar que Ullibarri fue quien se conectó a través de su ordenador portátil a la página web de la política y dejó un comentario amenazante a las 22.55 horas del 29 de junio de 2010.
El abogado del condenado, que no se ha presentado a la vista celebrada en el Supremo, se pregunta en su recurso en qué elementos se basó la Audiencia Nacional para descartar a su entonces novia, que vivía con él en su domicilio, como posible autora del mensaje.
Según señala, ambos tenían acceso al ordenador y a la cuenta de Facebook desde la que presumiblemente se realizó la navegación por Intenet y, asimismo, mantenían "cierto vínculo de amistad" con la etarra Nerea Bengoa. "¿En qué se basa el tribunal para poder considerar sin ningún género de dudas que el autor del mensaje era Ullibarri?", cuestiona.
CENSURÓ "ÉTICA Y MORALMENTE" LAS AMENAZAS
En este punto, el recurrente critica que la sentencia condenatoria valorara que fue militante de Jarrai hace más de 20 años o fuese simpatizante de la desaparecida Herri Batasuna, pero no hiciera alusión alguna a las afinidades políticas de su compañera sentimental.
Además, reprueba que la Audiencia "ignorara" que negó "con rotundidad" su autoría e incluso que censuró "ética y moralmente" el hecho del que se le acusa.
"No se ha podido despejar la duda sobre cual de los dos moradores de la casa y usuarios de los equipos informáticos fue efectivamente el autor del post enviado a Jiménez Becerril", insiste el abogado, para concluir que tampoco hubo ninguna "trascendencia social" en el acto al haberse enviado el mensaje humillante a "una dirección de email privada".
LA EUROPARLAMENTARIA EXPRESÓ SU TEMOR
La Audiencia Nacional consideró el pasado febrero que Ullibarri actuó de este modo en oposición a la postura planteada de forma pública por Jiménez-Becerril, que se mostró en contra de permitir que la miembro de ETA encarcelada Nerea Bengoa --amiga del condenado-- se realizara un proceso de inseminación in vitro.
Tras amenazar a la eurodiputada en su web, el acusado dejó un comentario en otra página de Internet que publicaba un artículo sobre la próxima fertilización de Bengoa. En este caso ponía: "Perros...seguro que va a salir precioso, como sus aitas...no como los vuestros, llorones, llorones, kagones y llenos de granos...que asko".
Durante el juicio, la eurodiputada popular indicó que temió por su vida y la de su familia después de recibir el mensaje amenazante. La 'popular' recordó ante el tribunal que fue uno de sus asistentes quien el mostró la frase.