Condenados a prisión un sargento y un cabo tras mantener un enfrentamiento, golpearse e insultarse

EUROPA PRESS 02/08/2012 17:05

Según la sentencia de la Sala de lo Militar a la que ha tenido acceso Europa Press, la discusión entre ambos mandos se inició después de que, en el marco de una comisión para transportar un vehículo desde Burgos hasta Almería, el cabo comunicara a un teniente la ausencia de su sargento para realizar el desplazamiento en el día acordado.

En este sentido, días después, el cabo llegó a su unidad y allí se encontró con el sargento, quien requirió su presencia para hablar con él en el interior del vehículo en el que trabajaba. Una vez allí, el sargento le recriminó haber comunicado al teniente su demora en Burgos, de manera que le acuso de ser un "chivato" y de "dejar con el culo al aire a los suboficiales" y le amenazó con sancionarle.

Con esto, el tono de la discusión se elevó hasta que el sargento propinó dos puñetazos al cabo en el costado derecho, lo que motivó que éste comenzara a proferir insultos y amenazas que fueron oídas por un segundo sargento, que se encontraba en las inmediaciones. De esta forma, encontró a los dos acusados encarados en el interior del vehículo, con lo que cogió al cabo de un brazo y le dijo que bajara del vehículo y se tranquilizara.

No obstante, en lugar de proceder tal y como ordenó su superior, el cabo se volvió a dirigir al coacusado al que llamó "hijo de puta" y dirigió expresiones como "te voy a matar" o "ten cojones una vez en tu vida y baja aquí conmigo. Tengo 34 años y los huevos muy negros para que vengas tú a tocármelos", todo ello mientras se quitaba la divisa identificativa de su empleo y la tiraba al suelo.

En esta línea, el cabo siguió incitando al sargento, a quien retó a ir a un espacio con gente para "arreglar" el asunto, con lo que el sargento se limitó a decirle que le dejara en paz, pese a lo que el segundo sargento tuvo que interponerse entre varios para evitar que el cabo agrediera al coimputado.

Así, la noche del mismo día de los hechos, el cabo acudió tras finalizar su jornada laboral y animado por su novia al servicio de urgencias de un hospital almeriense, en donde se le diagnosticó una contusión de parrilla costal derecha a consecuencia de los dos puñetazos que recibió del sargento, quien por dicha agresión, también ha sido condenado al pago de 100 euros.