El Congreso rinde homenaje este sábado a las víctimas del terrorismo por sexto año consecutivo

EUROPA PRESS 22/06/2015 18:53

Como en las ediciones anteriores, este acto de recuerdo tendrá lugar el 27 de junio, coincidiendo con el aniversario del asesinato de la primera víctima de ETA, Begoña Urroz Ibarrola, una niña de 22 meses que ese día de 1960 murió calcinada en un coche como consecuencia de un artefacto explosivo que la banda terrorista hizo explotar en la estación de autobuses de San Sebastián.

Hasta el año pasado este acto se celebraba en el Salón de Plenos del Palacio de la Carrera de San Jerónimo. Sin embargo, en 2014, el presidente del Congreso, Jesús Posada, para que pudieran intervenir también representantes de las víctimas, decidió trasladarlo a la Sala Ernest Lluch, el ministro socialista de Sanidad asesinado por la banda en el año 2000.

Así, tal y como sucedió hace un año, el sábado tomará la palabra para hablar en nombre de todos los afectados por el terrorismo la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Mari Mar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco, edil del PP de Ermua secuestrado y asesinado por ETA en 1997.

De su lado, el presidente del Congreso hará una breve intervención y propondrá que como colofón al homenaje se guarde un minuto de silencio en honor a todas las víctimas del terrorismo.

PLANTES Y POLÉMICA

El año pasado tres asociaciones de víctimas declinaron asistir a este acto en el Congreso: el Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco, Covite, Voces contra el Terrorismo y la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M, que decidieron 'plantar' a la Cámara por sus discrepancias con la política antiterrorista del Gobierno de Mariano Rajoy y por la presencia en las Cortes de la coalición abertzale Amaiur, a la que identifican con el "brazo político" de ETA.

Al final, pese a lo inicialmente previsto, tampoco lo hizo la presidenta de la Asociación de 11-M Afectados por el terrorismo, Pilar Manjón. Además, varios miembros de esta entidad que sí se sumaron al homenaje se declararon "indignados" porque Maria del Mar Blanco no había tenido en su discurso una mención expresa a las víctimas de los atentados que tuvieron lugar el 11 de marzo de 2004 en Madrid.

La presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo lamentó la polémica y aseguró que su intención no era hacer distinción entre víctimas. De su lado, la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, madre de joven fallecida en uno de los trenes que explotaron en 2004, dijo haberse sentido totalmente identificada con las palabras de Blanco, con la que compartió mesa presidencial.