"El odio que conduce a la venganza y a la muerte jamás puede encontrar justificación alguna", ha subrayado Soledad Becerril, que ha expresado su "profundo pesar" por lo ocurrido en sendos telegramas enviados al Defensor de los Derechos de Francia, Jacques Toubon, y al Embajador de Francia en España, Jérôme Bonnafont.
En ellos, la Defensora del Pueblo ha incidido en que Europa "es un espacio donde impera el estado de derecho y la ley, donde se defiende la vida, la libertad de expresión y la convivencia en paz" y, en este sentido, ha subrayado que por ello "los autores del atentado merecen toda la repulsa y condena de la sociedad europea, y que el peso de la ley caiga sobre ellos".
En la misma línea, Soledad Becerril ha subrayado su determinación para seguir defendiendo los Derechos Humanos "que son un logro de las sociedades avanzadas a los que Francia ha contribuido de manera muy destacada".
Finalmente, ha trasladado la colaboración y apoyo de la institución que preside para lograr que "desaparezca" de la sociedad "toda acción que atente contra el derecho a la vida y que signifique intolerancia extrema por razones de ideología o pensamiento".