En la primera reunión del comité ejecutivo de CDC tras las recientes elecciones catalanas, Madí ha anunciado ante la dirección convergente su decisión de abandonar la política para dedicarse a la actividad privada, una revelación que ha cogido por sorpresa a algún dirigente pero no a Mas, que conocía desde "hace años" su intención.
"Es una pérdida muy dolorosa", ha admitido Mas, al lado de Madí, en una rueda de prensa con una fuerte carga emocional, en presencia de otros dirigentes de Convergència que parecían no creerse el adiós del principal estratega del partido, justo en el momento de mayor "gloria", tras la victoria de CiU en las elecciones al Parlament.
Mas no ha escondido en ningún momento su pesar por la marcha de su máximo hombre de confianza, que le ha acompañado desde 1997 y, en especial, desde que Jordi Pujol le designó como su heredero al frente de CiU.
Según Mas, se trata de un "hombre brillante y valiente", que ha tenido que hacer frente a "situaciones muy difíciles" y ha recibido "muchos golpes", como cuando dimitió en 2003 como secretario general de Comunicación de la Generalitat por haber manipulado supuestamente encuestas.
Para realzar su figura, a la que ha dicho sentirse "muy vinculado", Mas ha remarcado que el "gran éxito" de las recientes elecciones catalanas, en las que CiU obtuvo 62 escaños que le permitirán formar gobierno, es en buena parte "atribuible" a Madí.
Artur Mas ha asegurado que habría hecho "lo que fuese" para que su mano derecha se hubiese quedado con él en el futuro Govern, aunque "sabía que hiciese lo que hiciese, él tenía la decisión tomada".
En el pasado, Madí ya le expuso su voluntad de dar el salto a la empresa privada, pero entonces Mas le pidió que "pospusiera" su decisión, pero ahora, una vez logrado el objetivo de volver al gobierno de la Generalitat, ya no podía retenerle más tiempo.
"No podía pedirle que alargase una etapa que hace años que quería que acabase de esta manera. No soy quién para abortar estos deseos", ha señalado Mas, que piensa seguir pidiendo a Madí que desde su nueva posición le "ayude en algunas cosas".
Mas tendrá que buscarle un sustituto, aunque es consciente de que no encontrará a otro igual: "O te quedas con el original o cualquier copia sería muy mala".
En la reunión del comité ejecutivo de CDC, Mas ha recibido la felicitación unánime de los miembros de la dirección convergente, tanto por la campaña electoral desplegada como por el resultado final.
Artur Mas ha puesto hoy el punto de mira en las próximas elecciones municipales, en las que CiU está "en una gran posición de salida para ganar", incluso en la ciudad de Barcelona, donde parte desde una posición "inmejorable".
Pese a las buenas perspectivas -CiU ganó en 921 municipios de Cataluña sobre un total de 947 en los comicios autonómicos del 28 de noviembre- Mas ha llamado a los suyos a comportarse con "grandes dosis de prudencia, cautela y modestia".