El portavoz de CiU en el Congreso y candidato a las elecciones generales, Josep Antoni Duran, no ha descartado que el próximo Gobierno decida rebajar el sueldo de los funcionarios en función del "agujero" económico que herede después de los comicios del 20 de noviembre.
En una mesa sectorial sobre reactivación económica, ha salido al paso del debate abierto en Cataluña sobre la posibilidad de rebajar de nuevo los salarios de los trabajadores de la administración pública en plena crisis, y que este viernes ha zanjado la vicepresidenta del Gobierno catalán, Joana Ortega, afirmando que todos cobrarán la paga extra de Navidad.
En el caso del resto de España, Duran ha evitado pronunciarse sobre la conveniencia de la medida y se ha limitado a destacar que el futuro Ejecutivo central deberá analizar si hay que abrir este frente.
A su juicio, habría que tocar "lo menos posible" el sueldo de los funcionarios, pero considera que el próximo Gobierno debe analizar el estado de las cuentas públicas que le deje el presidente actual, José Luís Rodríguez Zapatero.
Ha insistido en que si el Ministerio de Defensa de Carme Chacón tiene un agujero de 20.000 millones de euros, podría haber más en otros departamentos del Estado: "No sé cuántos otros agujeros habrá".
Ha explicado una serie de medidas que, a su parecer, ayudarían a afrontar la actual coyuntura económica, como la reiterada demanda del pacto fiscal, el impulso de un plan de choque y un pacto de Estado entre fuerzas políticas, sociales y sociedad civil.
Sobre el Impuesto de Sociedades, propone aumentar un 50% la deducción por reinversión pasando del 12 al 18%, así como crear un tipo del 15% para microempresas, reducir del 25 al 20% el de las pymes y del 30 al 25% el de las grandes empresas.
Además de pedir una mejora de la financiación y liquidez de las pymes, ha reclamado una modificación en el pago del IVA; una ley de morosidad, otra de mecenazgo; una apuesta por la cuenta corriente tributaria; la externalización de la economía y una reforma del servicio diplomático español para que las embajadas se pongan al servicio del mundo empresarial.
También ha abogado por una ley de emprendedores y 'business angels', que permita que el pequeño emprendedor que no facture más de 30.000 euros o lleve menos de dos años funcionando esté exento de pagar el IRPF y el Impuesto de Sociedades así como que tenga una bonificación del 100% de las cuotas de la Seguridad Social
Para empresas de nueva creación o en proceso de expansión plantea que puedan gozar de una financiación 'business angels' --cuando un empresario financia la idea de un joven que quiere sacarla adelante-- con deducciones varias para el que financia el proyecto.
En su voluntad de introducir el valor del fracaso en la sociedad española, ha recordado que el difunto fundador de Apple, Steve Jobs, le echaron de la universidad y de la empresa pero luego triunfó.