En una rueda de prensa en San Sebastián, preguntado por su valoración de la consulta alternativa celebrada en Cataluña, ha considerado que "no se han hecho las cosas bien en los últimos años" y ha afirmado que el domingo se demostró que hay un sector que es "importante" en la sociedad catalana que "quiere votar, expresando su opinión y que además, claramente es partidaria de la independencia".
Sin embargo, ha denunciado que durante este tiempo ha habido "provocaciones tanto del Ejecutivo de Rajoy como de sus ministros hacia esa realidad catalana". "España es un Estado plurinacional, y esto tendría que tener acogida en una reforma de la Constitución, además de otras medidas financieras y de reconocimiento de la singularidad de Cataluña", ha aseverado.
Asimismo, ha considerado que los soberanistas catalanes "quieren ir demasiado deprisa, aprovechándose, además, de la incapacidad política del señor Rajoy y del PP". De este modo, ha asegurado que "una consulta o un referéndum consultivo decisorio nunca puede ser un primer paso para la resolución del conflicto, sino el diálogo y una solución pactada entre todas las partes, con cesiones, y a continuación una convocatoria a las urnas".