Los agentes de la Policía autonómica vasca encontró los restos del cuerpo sin vida de Rebollo metidos en bolsas de plástico en la vivienda que Aguilar tiene en la calle Iturriza de Bilbao y en el gimnasio ZEN4, que regentaba en la calle Máximo Agirre. Además, también peinaron la ría de la capital vizcaína, sin éxito.
El falso maestro shaolín, de 47 años, reconoció haber matado a una mujer, después de que la Ertzaintza le encontrara el pasado domingo en el citado gimnasio, donde había golpeado a la joven nigeriana de 29 años, Maureen Ada Otuya, hasta dejarla en estado de coma. La agresión le produjo la muerte.
El hermano menor de Jenny Sofía Rebollo, Jainer, que vive en Bilbao, están realizando las gestiones oportunas para conocer cuándo podrá disponer la familia del cadáver con el fin de poder repatriarlo a Colombia. La madre, Jóvita Tuirán, se encuentra "muy angustiada" ante la posibilidad de que el cuerpo de su hija se pueda quedar en España y ha destacado que no disponen de recursos económicos para proceder a su repatriación.
Las fuentes consultadas han señalado que los restos del cadáver de Jenny que se han localizado, se encuentran todavía en manos de los forenses, que tratan de determinar las circunstancias en las que falleció la víctima. Los familiares están a la espera, asimismo, de si la Ertzaintza logra encontrar todos los restos del cuerpo sin vida de Jenny.
Los agentes no han cejado en su empeño de encontrar más pruebas contra el presunto asesino y trata de determinar si éste ha podido asesinar, con anterioridad, a otras víctimas. Por ello, ha estado inspeccionando a fondo los inmuebles propiedad de Juan Carlos Aguilar y, en especial, el gimnasio en el que, hacía poco, éste había realizado obras de reforma.