Tras la detención de sus cuatro máximos responsables en menos de un año (Francisco Javier López, Garikoitz Aspiazu, Aitzol Iriondo y Jurdan Martitegi), la organización, según fuentes de la Lucha Antiterrorista, está dirigida por tres hombres y dos mujeres: Asier Borrero Toribio, Iratxe Sorzabal Díaz, Iurgi Mendinueta Mintegi, Andoni Sarasola Yarzabal e Izaskun Lesaka Argüelles.
Cualquiera de esos cinco terroristas estaría en disposición de asumir la dirección de ETA. Las fuentes consultadas creen que contará tanto la experiencia y la capacidad de influencia sobre los demás como su libertad de movimientos para reestructurar una organización seriamente dañada.
Uno de los mejor colocados en esa cúpula es Iurgi Mendinueta Mintegi. 'Aitor'. Fue hombre de confianza tanto de Garikoitz Aspiazu, 'Txeroki', como de su sucesor, Aitzol Iriondo, 'Gurbitz'. Desde la caída de este último, Mendinueta, de 27 años, ha tratado de recomponer la dirección militar de la banda.
Otro de los terroristas más considerados en el seno de ETA es Asier Borrero, 'Arrano', de 25 años. Era uno de los hombres de confianza del último jefe militar, Jurdan Martitegi. En medios policiales destacan su gran frialdad. El pasado mes de septiembre él solo saltó la tapia de la Comisaría de la Ertzaintza de Zarauzt depositando allí una mochila bomba. Suma media docena de atentados con el comando Vizcaya y la Guardia Civil cree que fue él quien disparó el pasado lunes contra un gendarme en Francia.
La aparición del nombre Iratxe Sorzabal en ese "órgano colegiado" preocupa particularmente a las fuerzas de seguridad. Se trata de una 'veterana' de la organización, de 37 años. Le imputan una docena de atentados y tres asesinatos. Es considerada la más radical del grupo.
En un segundo nivel de ese grupo de cinco etarras se sitúa Izaskun Lesaka, de 34 años. Dirigente de las organizaciones juveniles abertzales Jarrai-Haika-Segi, se le considera un personaje con ascendencia sobre algunos sectores de la banda, a la que se incorporó formalmente en 2005 para evitar enfrentarse a una condena de diez años de cárcel.
Andoni Sarasola completa, según las fuentes consultadas, esa cúpula terrorista. Muy próximo a 'Gurbitz', logró escapar de la redada en la que cayó su jefe el pasado mes de diciembre. Es hermano de Martín Sarasola, uno de los terroristas que voló el aparcamiento de la T-4 y fue número uno en la candidatura de Abertzale Sozialistak en la localidad navarra de Lesaka. Su perfil y experiencia es muy parecida a la Mendinueta, siempre a la sombra de los jefes militares detenidos en los últimos meses.