Los gobiernos de Euskadi y Cataluña han reclamado que se priorice el desarrollo de los corredores ferroviarios Atlántico y Mediterráneo frente a otras opciones de diseño radial o circular en el Estado español.
La consejera vasca de Infraestructuras, Arantxa Tapia, y el consejero catalán de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, se han reunido este jueves en Barcelona para analizar la colaboración de ambos gobiernos en materia de infraestructuras de transporte, según ha informado el Gobierno Vasco en un comunicado.
Ambos representantes institucionales han compartido la necesidad de "profundizar" en la colaboración entre Euskadi y Cataluña para la futura conexión de los ejes ferroviarios Atlántico y Mediterráneo.
"RECONOCIMIENTO"
Tapia y Rull han subrayado el "reconocimiento" que merecen ambos territorios por su ubicación y porque representan un "camino natural" en la conexión con Europa.
El Gobierno Vasco y la Generalitat de Cataluña mantienen una posición compartida acerca de la necesidad de mejorar las conexiones de transporte a través de un ferrocarril europeo para la mejora de la cohesión territorial, el desarrollo socioeconómico y la competitividad.
Por esta razón, han reclamado a las instituciones del Estado que realicen una "clara apuesta" por estos ejes, y que den un impulso "prioritario" al desarrollo de los corredores Atlántico y Mediterráneo, "teniendo en cuenta las consecuencias negativas que ha supuesto el esquema radial de las infraestructuras en el Estado".
"NETAMENTE EXPORTADORAS"
Ambos gobiernos han subrayado que las economías vasca y catalana son "netamente exportadoras", y que requieren de unas infraestructuras competitivas "que estén más y mejor conectadas con Europa".
En lo que respecta a las redes por carretera, ambas comunidades autónomas soportan altos tráficos de vehículos pesados y sufren de una "saturación" en las principales vías de conexión con Europa, por lo que han asegurado que "la transición de carretera a ferrocarril se hace urgente y relevante".
Esto, según han indicado, resulta especialmente relevante si se tiene en cuenta que sólo el uno por ciento de las mercancías que transitan por Irun o Portbou utilizan el modo ferroviario.
Por todo ello, Tapia y Rull han solicitado la implicación de las administraciones europea y española, así como de las regiones involucrada y el sector privado, para lograr que el ferrocarril tenga una cuota dentro del conjunto del transporte terrestre de mercancías del estado cercana a la media de la UE, que se sitúa entre el 17 y el 18 por ciento.